La mayoría de las veces que leemos está frase de una vez solemos pensar que se trata de un compromiso de pareja. La vida, no puede ser vista sólo desde ese cristal, pues no se establecen compromisos, si no estás bien contigo mismo. Hoy me comprometí conmigo…
Hoy me comprometí,
quiero decirles a gritos,
hoy me fui a una tienda,
y me compré un bello anillo,
como lo quería,
como lo soñaba,
como siempre lo había pedido.
No es que me cansé de esperar,
hombres han existido,
es que me volví prioridad,
de mis sueños,
mis principios,
ya no quiero impresionar,
me parece aburrido,
el anillo que me di,
lleva orgullo,
lleva olvido.
Olvido de las tristezas,
que sentí con retorcijos,
olvido de las experiencias,
que me hicieron caminar sin sentido,
qué bonito compromiso,
el que hoy hago conmigo,
me dedico las canciones,
hasta de Julio Jaramillo.
Me olvidé de arreglarme,
para que me vean bonito,
ahora lo hago para mí,
y disfruto ese gran brillo,
que se ve en el espejo,
sin dramas,
sin sacrificios.
Creía que era un fracaso,
Por no tener un hombre conmigo,
Me puse a mirar amigas,
Cada cuento,
Muy sufrido,
Y me di cuenta que debes,
estar bien,
Contigo mismo,
Sino ese compromiso,
Nunca tendrá sentido.
Hoy yo me comprometo,
A decirme mil cumplidos,
¡Qué bella!
¡Lo estas logrando!
¡los frutos se han sentido!
Eres mujer grandiosa,
Aunque otros no hayan visto,
Lo especial de tu reflejo,
Lo que irradias con tu brillo.
Y es que esta sociedad,
nos enseñó que el compromiso,
se hacía para un hombre,
cuidarlo y tenerle hijos,
aceptarle los impases,
las mujeres y otros hijos,
orgasmos que no sentiste,
¿Qué van a decir mis amigos?
¿Qué difícil es priorizarse?
comprometerse contigo,
cuidarte de cada cosa,
incluso de los amigos,
amarte por, sobre todo,
amarte como principio,
que nada tumbe tu corona,
el compromiso es contigo.
So sweet
Thanks!
Como dice Juan Carlos Baglietto en "El Témpano":
No importa cuánto uno tarde en darse cuenta de lo que realmente importa en la vida; lo único que cuenta es llegar a ese punto, luego de tanto caminar entre cardos y espinos, luego de mil tropiezos o, como se suele llamar a la experiencia, fracasos.
Llegaste y lo celebro. Por fin puedes ver a la mujer valiosa más allá de su forma física. Ahora puedes ver lo que yo veo...