Que interesante lo has planteado, desmitificamos pero al mismo tiempo creamos mitos sin darnos cuenta, ¿será que es necesario?.
Pienso que la mitificación no es un proceso cultural o algo que aprendemos mientras nos desarrollamos, creo mas bien que es una necesidad que tenemos para darle significado y formar los valores que guiarán nuestra vida.
El desafío no está en desmitificar, sino mas bien en aprender a reconocer cuándo un mito nos construye y cuándo no.
Fantástica reflexión bro, un gran abrazo y mucho éxito.
Hola, desde que nacemos nos meten mitos y leyendas, es un fenómeno cultural, desde las creencias en el famoso “Coco”, hasta el cuento de que si no te portas bien, Dios te va a castigar. También está el mito del cielo, el infierno, el purgatorio y pare de contar.
Están mitos familiares y religiosos, plegados a la obediencia de una creencia.
Además de los mitos y leyendas populares, que le dan a los niños desde que nacen, y que algunos de ellos van perdiendo a la medida que crecen y leen, mientras que otros los refuerzan, basados en la ignorancia familiar y la creencia religiosa del castigo divino.
Ya, con esa visión y esa creencia en mitos y leyendas, uno se va creando, o va asumiendo mitos, ya sean personales o sociales, mitos como el éxito, el seguimiento del líder, como el de la ruptura de una religión, y el abrazo a otra, y así con muchas otras situaciones de la vida común.
El mito y la creencia son parte de nosotros, a nivel cultural, religioso y familiar.
Y cada vez que rompemos con un mito, aumentamos nuestro nivel de consciencia, y abrimos el abanico mental para entender más realidades.
Hay estudios, muy serios, sobre este tema. De hecho, lo vi y lo estudié en la universidad, en una electiva, llamada mercadeo religioso y cultural.