I have something to tell you now that I can do it and it is that you will see me laugh in the right moments to do so, so that others feel that there is a connection and nothing to hide, so that smile marks the beginning of what is a fraternal friendship in search of many more moments.
I will smile when your achievements become a reality in your life, I will not feel deep down a healthy envy for not feeling like a parasite, just knowing how to breathe and smile, that is why I embrace you, I will embrace you with such strength that you will believe that I really do it because I am born to do it in kindness.
I have another thing to say, I am counting the steps I am taking by your side as the chasm of signs from long ago that denied me as a normal being able to establish myself in the society full of constructs, but remember, I told you that I will smile in spite of it so you won't feel that there is something wrong with me happening.
Because it's not that you don't deserve to know, it's that you'll feel you're wasting your life on what is your opposite, a nemesis whose light sees and perceives it as infinite darkness and not precisely as an eclipse, it's more like a bloodless holocaust.
There is something else I want to say or ask you, but I know that neither of the two will do it because I know you, but even so I want to get close to your ear and not to your soul so as not to destroy it with these words; you have two options, neither of which you will like, the first is to arrive home from a busy day with a bouquet of red roses, as dark as the pool of blood staining the soles of your shoes that you will find in the kitchen next to my pale, inert and lifeless body.
The second option is to let me go creating the insatiable demon of your mind full of regret, where the nights will not accompany you but only the light of your cell phone illuminating that face that I stopped touching once waiting for someone else to tell you that their feet have been stained with my own blood and whose life is no more.
But I seriously want to tell you one last thing in the face of all this, thank you for not even clinging to take either of the two options, because I know that your love as well as it sustained me, will create a third option where my soul will not have to leave this damaged body, somehow you manage to outwit death as the many times you have succeeded.
And yet when I am there by your side I will keep smiling when your busy and worried insides are crying waiting for a fourth option to happen and for which neither of us have an answer or a date for that event that will eventually come.
I have to tell you something, as if this time is really the end of the last time you will read new lines from my fingers processing the little mind I have left of being, and that is that I love you, and at the same time I hate to love you because it seems not to be enough to untie me from the infinite demons that haunt us.
If I go crazy, I know that you will love me with the same madness, if I let myself be carried away by the darkness I know that you will try to turn on the light even if the bulb burns a thousand times, and if I decide never to say goodbye, I know that at some point you will do it even with all the love you have for me, because the infinite is just that, infinite for itself and not for something else.
But in the meantime, I want you to always know that I love to wake up with the smell of the freshly brewed coffee you prepare for me every morning, with the kiss you place on my forehead and lips, and with that embrace as strong as if you felt it would be the last one.
Tengo algo que decirte ahora que puedo hacerlo y es que me verás reír en los momentos propicios para hacerlo, para que los demás sientan que hay una conexión y nada que ocultar, para que aquella sonrisa marque el inicio de lo que es una fraternal amistad en busca de muchos más momentos.
Voy a sonreír cuando tus logros se vuelvan una realidad de tu vida, no sentiré en el fondo una envidia sana por no sentirme cual parásito solo saber es respirar y sonreír, por eso te abrazo, te abrazaré con tal fuerza que vas a creer que de verdad lo hago porque me nace hacerlo en bondad.
Tengo otra cosa que decir, estoy contando los pasos que voy dando a tu lado como la sima de señales desde hace mucho tiempo que me negaban como un ser normal capaz de establecerse en la sociedad llena de constructos, pero recuerda, te dije que iba a sonreír a pesar de ello para que no sientas que hay algo malo en mi sucediendo.
Porque no es que no lo mereces saber, es que sentirás que desperdicias tu vida en lo que es tu contrario, un némesis cuya luz lo ve y percibe como una infinita oscuridad y no precisamente como un eclipse, es más como un holocausto sin sangre.
Hay algo más que quiero decir o pedirte, pero se que ninguna de las dos lo harás porque te conozco, pero aun así quiero acercarme a tu oído y no a tu alma para no destruirla con estas palabras; tienes dos opciones de las cuales ninguna te va a gustar, la primera es llegar de un día ajetreado a casa con un ramo de rosas rojas, tan oscuras como el charco de sangre manchando la suela de tus zapatos que te vas a encontrar en la cocina junto a mi cuerpo pálido, inerte y sin vida.
La segunda opción es dejarme ir creando el demonio insaciable de tu mente llena de arrepentimiento, donde las noches no te van a acompañar más que solo la luz de tu celular iluminando ese rostro que deje de tocar una vez a la espera de que alguien más te diga que sus pies han sido manchados de mi propia sangre y cuya vida ya no está.
Pero quiero en serio decirte una última cosa ante todo esto, gracias por no aferrarte siquiera a tomar alguna de las dos opciones, porque se que tu amor asi como me sostuvo, creará una tercera opción donde mi alma no tendrá que abandonar este cuerpo dañado, de alguna forma te la arreglas para burlar la muerte como las tantas veces lo has logrado.
Y aun así cuando esté allí a tu lado voy a seguir sonriendo cuando tu interior ocupado y preocupado está llorando a la espera de que una cuarta opción suceda y de la cual ninguno de los dos tengamos respuesta ni fecha alguna de aquel evento que en su momento llegará.
Tengo que decirte algo, como si esta vez fuese en verdad el final de la última vez que leerás líneas nuevas de mis dedos procesando la poca mente que me queda de ser, y es que te amo, y a la vez odio amarte porque parece no ser suficiente para desatarme de los infinitos demonios que nos acechan.
Si me vuelvo loco, se que me amaras con las misma locura, si me dejo llevar por la oscuridad sé que intentaras encender la luz aun cuando el bombillo se queme mil veces, y si decido nunca decirte adios, se que en algún momento lo harás aun con todo el amor que me tienes, pues el infinito es solo eso, infinito para sí mismo y no para algo más.
Pero mientras, quiero que siempre sepas, que amo despertar con el olor del café recién hecho que me preparas todas las mañanas, con el beso que plasmas en mi frente y labios, y con ese abrazo tan fuerte como si sintieras que será el último.