Hola mi querida Ivana, oye qué coincidencia, pero dejame y te comento primero.
Bueno el lugar en si esta excelente, super hermoso, el lago donde están los patos una atracción natural de lo mejor, por otro lado me hiciste recordar que en Venezuela en nuestra capital Caracas, hay un lugar llamado el museo de los niños, no se si todavia se llama asi pero bueno, lo cierto es que es también algo parecido por dentro ves cosas de temáticas planetarias entre otras, la verdad de niño me divertí mucho allí. Lo otro es que esto que escribes a lo ultimo de tu post:
Estar en nuestro lugar te anima a filosofar y a abrir la mente para tomar conciencia de la finitud e insignificancia de nuestra existencia en este universo infinito lleno de seres estelares, algunos con la capacidad de destruirnos y borrarnos de la existencia en un abrir y cerrar de ojos, borrando todo rastro. Qué pequeños somos y qué grandes nos creemos cuando sentimos que lo poseemos todo, cuando en realidad no poseemos nada y somos como hormigas ante la majestuosidad y monstruosidad del inmenso espacio exterior.
Casualmente hace menos de unos 5 días pensaba exactamente lo mismo, que no tenemos idea de lo pequeño que somos ante la creación, ante todo eso esta mas alla de nuestro ojos, y que muchas veces nos desgastamos tanto en lo terrenal (lujos, egocentrismo, envidia, egoismo, orgullo) y pare de contar que en un abrir y cerrar de ojos podemos desaparecer, osea es como imaginar la vista de una hormiga mirando hacia arriba con el pie de un humano la aplastara, así de pequeño somos en este sistema que nos rodea.
Me gusto bastante este post.
Que bello. Deberías retornar a ese sitio y mostrarnos como es jeje.. Si, somos como hormiguitas y nos creemos mucho cuando no somos nada en realidad. Pensar que el universo nos puede destruir en segundos es aterrador. Gracias por comentar!