Mi primer día como madre
Equipo de @moherhood, ya están cumpliendo un año. Maravillosa noticia, ese se llama trabajo y carisma para mantener y hacer crecer la comunidad.
Hace poco tiempo que estoy con Uds. porque veía la comunidad como una espacio para madres en las primeras épocas de la maternidad. Me motivó a incorporarme la amiga @marybellrg, porque es bien cierto, algunas personas no son madres pero todos somos hijos. Todos tenemos una madre, felizmente a nuestro lado o tristemente ausente.
Mi primer hijo
Mi primer día como madre
Me inicié como madre muchos años atrás, pero sin embargo hay cosas que nunca se pieden en la memoria. Recuerdo perfectamente la primera mirada a mi hijo (hoy el mayor), presentado por el médico que lo trajo al mundo. Escuchar su débil llanto y ver su carita arrugada y su cabello intensamente negro, me causaron una emoción indescriptible, única.
Escribiendo esto recuerdo hasta los comentarios de algunos parientes que nos visitaron, la cara de plena satisfacción de mi esposo. La espectacular emoción de los abuelos. Todo regresa a la memoria, pintado por el afecto.
Mi primer hijo fue un bebé grande y hermoso, pero por la bilirrubina necesitó incubadora por unas horas. Y por la anestesia no pude ponerlo al pecho cuando nació, debímos esperar, él y yo.
Cuando me lo colocaron en los brazos sentí la inexplicable emoción de ser madre. El calorcito del bebé, pegadito a mi cuerpo me produjo una ternura tan inmensa que sólo volví a sentir con mi nuevo hijo. Sentir ese cuerpecito en los brazos ¡no tiene comparación con nada! ¡Sentirlo sobre el hombro para sacarle los gases, es único!
¡La maternidad es de por vida! Una madre jamás deja de serlo y en los adultos siempre verá presentes a los niños, en los momentos de alegría o de llanto.
Mis hijos niños, compartiendo su alegría.
En mis hijos adultos, reconozco hombres de bien. Hoy soy yo quien recuesta la cabeza en su hombro y, créanme, me derrito como cuando su cabecita se apoyaba en el mío, con los bracitos alrededor de mi cuello.