Para empezar te felicito por el desempeño que estás realizando al cuidar a tu hermosa nieta, fue un cambio generado por las circunstancias pero ahí estás, poniendo todo tu empeño. Tu experiencia también refleja la dedicación y el tiempo que le haz dedicado y eso es muy importante en la crianza y educación de los niños, ya que los hace sentirse seguros y para serte sincera me conmovió esta frase:
En vista de esto le digo: No te pongas límites, di en su lugar: Si puedo.
Lis me miró asombrada porque le coloqué en sus manos un par de ajíes. A lo que yo seguidamente le pregunté: ¿Si puede o no puede?.
No solo se lo dijiste, además le diste la oportunidad de demostrarlo y que tú confiabas en que ella sí podía hacerlo, cómo padres, abuelos o tutores de los niños debemos ser positivos y generar esos lazos de confianza, que son tan necesarios en este mundo tan cambiante, para demostrar que no están solos y que somos un apoyo cuando lo necesiten o se sientan frustrados debido a que sus emociones están aprendiendo a manejarlas.
Agradecida por qué compartas tu experiencia, tomaré en cuenta tus consejos para aplicarlos en la enseñanza de mi pequeño. Saludos para ti y para Lis.
Primero, maravilloso comentario. Sinceramente estoy contigo, los niños necesitan lazos de amor, apoyo y realidad. Yo sé que Lis tiene muchas condicionales, algunas por sus condiciones médicas y otras por contextos que le han tocado en la vida. Pero me gusta saber que poco a poco va cambiando, aprendiendo y asumiendo más emociones que nunca antes había expresado.
Segundo, agradecida contigo por leer atentamente la historia de Lis y mía. La verdad sentí la necesidad de escribirla, porque me siento tan satisfecha de su gran paso que acompañó con una sonrisa.
Bendiciones para ti y tu niño, bendecido inicio de semana