Luego del New American Cinema, pasaron algunos años para que el cine independiente en Estados Unidos volviera a tener el auge que tenía en la década de los setenta. Realizadores como Jhon Cassavetes, Robert Altman, Arthur Penn, que buscaron nuevos métodos de dirección en la cinematografía y que determinaría un nuevo ciclo entre el cine clásico de Hollywood y el cine de autor. Pero la era postmoderna exigía a gritos nuevos paradigmas en el ámbito estético y tecnológico. Así, las creencias y necesidades de los autores de los noventas pedían un nuevo movimiento después del New American Cinema. Este cambio estaría marcado por un autor que no escatimaría en crear una obra maestra en su ópera prima. Sexo, mentiras y cintas de video (Sex, lies and videotape) sería el film que marcaría un final y un nuevo comienzo para el cine independiente. Steven Soderbergh filmó una película que habla de sexo y de todas sus consecuencias, pero lo que hace atractiva esta obra cinematográfica es que toca temas sexuales que pocos realizadores contemporáneos se atrevieron a tocar: La asexualidad.
Ann es una mujer joven, recatada y sencilla. Pero no es buena en la cama, nunca ha tenido un orgasmo y tampoco se ha masturbado. Ann, reconoce no gustarle el sexo y le confiesa a su terapeuta que siente sobrevalorado el placer sexual. Su matrimonio con John está en crisis, y mientras Ann vive con sus traumas y tabúes psicológicos, su esposo se acuesta con Cynthia, la alocada, sexual y extrovertida hermana menor de Ann. Pero la llegada de Graham, el viejo amigo de universidad de John, supone un cambio en la vida de las hermanas.
Cynthia irrumpe en el apartamento de Graham. Ambos están de acuerdo en quién es Jhon, el esposo de Ann.
Finalmente, Cynthia le confiesa todo a Graham en la cinta de vídeo.
La sinopsis de esta trama parece ser una formula acertada y típica. Pero cuando las mujeres se atreven a hablar sobre sexo frente a una cámara de vídeo, la historia pasa a ser otra. Soderbergh quiso representar al característico matrimonio de la clase media, ese que se mantiene unido sólo por las apariencias (o el temor) de terminar la relación, pues ninguno de los dos se buscan ni se atraen sexualmente. A decir, observamos en el filme un contraste entre Ann y Cynthia. Por un lado, tenemos a una mujer introvertida, incapaz de conocer su propia sexualidad y con muchos prejuicios y tabués sobre el sexo. Por el contrario, Cynthia, disfruta de su sexualidad, la conoce, la vive, experimenta con ella y no teme en hablar y desnudarse frente a una cámara de vídeo. Parece ser que el problema del filme empieza cuando vemos a Jhon teniendo relaciones sexuales con su cuñada, mientras Ann le confiesa a su terapeuta todos sus traumas psicológicos. No obstante, la llegada del viejo amigo de Jhon a la ciudad, -Graham- supone una química inmediata entre él y Ann, quien le ayuda a buscar un departamento en alquilar en Baton Rouge.
Ann es capaz de abrirse con Graham, confesarle cómo se siente respecto al sexo y el poco interés que le da. Para nuestra sorpresa, Graham le revela a Ann que es una persona impotente: totalmente incapaz de tener una erección frente a una mujer. Poco a poco, descubrimos el proyecto personal de Graham, una vez que observamos a Ann preguntar sobre el contenido de unas cintras de video clasificadas con nombres femeninos. En este momento, sabemos que se trata de mujeres que hablan frente a una cámara sobre sexo, a partir de preguntas que realiza Graham. Seguidamente, vemos cómo le confiesa a Ann, que algunas de estas mujeres se desnudan o se masturban mientras están siendo filmadas. Por otra parte, nunca vemos a ningún personaje desnudarse o masturbarse en el filme, simplemente se trata de una información que nos da el personaje de Graham y Cynthia, respectivamente.
El filme es, sin duda, un sutil drama erótico que habla de sexo sin mostrar el sexo, porque no es el verdadero problema, sino el medio hacía conflicto principal. Aquí la relación entre los cuatro personajes se quiebra al develarse no sólo los secretos en una cinta de vídeo, sino también el autorreconocimiento entre ellos. Soderbergh fue capaz de crear personajes atípicos, tal como es el caso de Ann y Graham, y personificar sus antítesis en los personajes de Jhon y Cynthia. El título del filme corresponde al conflicto de la trama. Las cintas de vídeo revelan los problemas y secretos de cada uno, pues interviene como un voyeur sin la necesidad de que el espectador actúe como tal. En este sentido, el filme podría considerarse un texto reflexivo al observar las cintas de vídeo de la misma manera en que lo hacen los personajes (Graham y Jhon), que como propuesta estética nos muestra un lado más “realista” del filme, al hacer uso de sus propios instrumentos de producción.
Jhon mira la cinta de vídeo donde Ann y Graham confiesan todo. A partir del último fotograma vemos la escena distinto.
En el filme, tanto Cynthia como Ann, se atrevieron a decir su nombre frente a una cámara de vídeo y hablar sobre su intimidad, ya sea sobre sexo, traumas e inseguridades. Porque si hay algún adjetivo que pueda describir este filme, es ese. Pues de la inseguridad parte los temores y prejuicios de los cuatro personajes.
En el cuarto acto del filme, vemos una de las escenas más largas y de mayor relevancia en todo el metraje. Se trata de la confesión entre Ann y Graham vista por Jhon. Entendemos que el tema (conflicto) sexual sólo es una excusa hacia el verdadero problema de estos personajes, que no es más que la negación de reconocerlos y enfrentarlos. Es, además, donde entendemos que las mentiras es lo que sustenta sus vidsa y cada uno de sus traumas. Por otro lado, Ann es capaz de confesar que siente deseo sexual por otro hombre. Igualmente reconoce sentir curiosidad por saber qué se siente tener un orgasmo.
En 1989, Soderbergh mostró a las mujeres hablando sobre sexo frente a una cámara de vídeo. Retrató a un personaje cuyos trastornos y desilusiones lo transformaron en un hombre impotente. Nos hizo reflexionar acerca del sexo, la intimidad, los sentimientos y cómo puede influir en las inseguridades de cada uno. Sex, lies and videotape es un filme psicológico acerca de los traumas sexuales, pues al final hasta el más sex adict –como es el caso de Cynthia y Jhon- nos devela sus temores. Temor hacia la soledad y a no sentirse deseado por otro. Pero no menos importarte, la película nos deja una interrogante que nos hemos hecho en más de una oportunidad, y es que ¿realmente existe el sexo sin emociones? Llegar al éxtasis, tener un orgasmo y disfrutar ¿sin emociones? ¿Hasta qué punto decidimos engañarnos a nosotros mismos para no padecer? Graham lo demostró al ser incapaz de tener una erección, luego de admitir su verdadera condición patológica. Sin embargo, y como lo menciona Ann, el problema de uno, terminó por convertirse en el de todo.
Se admiran las grandes obras y se guardan en la memoria como el momento en que fueron vistas. La ópera prima de Soderbergh es actualmente preservada por el Registro Nacional de Cine al ser considerada cultural, histórica o estéticamente significativa. Compitió en Cannes, llevándose la Palma de Oro y convirtió a Miramax, en el estudio más asociado al cine independiente en Estados Unidos. Para la cultura popular, el título del filme ha sido referencia en capítulos de series y letras de canciones. Sex, lies and videotape es el filme que habla (a modo de confesión) sobre lo que nos avergüenza y tememos.
¡Felicidades! Esta publicación obtuvo upvote y fue compartido por @la-colmena, un proyecto de Curación Manual para la comunidad hispana de Hive que cuenta con el respaldo de @curie.
Si te gusta el trabajo que hacemos, te invitamos a darle tu voto a este comentario y a votar como testigo por Curie.
Si quieres saber más sobre nuestro proyecto, acompáñanos en Discord: La Colmena.
This post was shared in the #spanish-curation channel in the Curation Collective Discord community for curators, and upvoted and reblogged by the @c2-spanish community account after manual review.
@c-squared runs a community witness. Please consider using one of your witness votes on us here