Desde hace un tiempo para acá me he puesto a pensar, tal vez melancólico por la tristeza de saber que puedo irme de este plano terrenal sin dejar un legado trascendental que pueda servir de guía o motivación a otras personas cercanas a mi círculo familiar o de amigos. Durante el siglo pasado era muy común escuchar a nuestros padres, abuelos o bisabuelos contar anécdotas o rememorar a sus padres, abuelos, bisabuelos, tatarabuelos, trasbisabuelos, rebisabuelos, retatarabuelos o bisretatarabuelos, pasando sus vivencias de generación en generación en memoria de eventos que marcaron su vida en la forma de ser de toda una familia.
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En pleno siglo XXI solamente quedan algunos vestigios de lo que hicieron nuestros padres y a lo sumo se trae a colación algunas remembranzas de los abuelos, sin ir más allá. Tal vez nos convirtamos en unas fotografías guardadas en un álbum o en una carpeta del disco duro de una computadora, no quiero imaginar que toda una vida dedicada al aprendizaje de un oficio o profesionalización en estudios de licenciatura, maestría, doctorado y postdoctorado, sumando la honradez, honestidad y apego a las buenas costumbres, todo eso culmine siendo un sticker pegado a la pared mientras dure su pegamento y nuestras enseñanzas queden apiladas en anotaciones de cuadernos que pierden su magia y esencia al transcurrir el tiempo.
Ya cerca de los 60 años de edad llega el momento de reflexión sobre el sentido de nuestras vidas, ¿tanto trabajo y dedicación en el campo de la investigación científica ha aportado algo novedoso a nivel mundial o nacional?, ¿valió el esfuerzo y tiempo invertido en estas actividades o solamente quedarán los artículos y publicaciones en la revistas científicas?. Pienso que mi Tutor académico y yo sabemos el número exacto de "papers" publicados, me atrevería a decir que ni mis hijas ni mi esposa lo saben con certeza.
Al desvincularme de las actividades del laboratorio y del otro trabajo, ya vendrán otras personas que ocuparán mi escritorio, tomarán la PC y poco o nada se hablará del investigador que desarrolló un dispositivo capaz de producir señales ante la incidencia de luz sobre el material. Otros vendrán y tomarán mi lugar, eso es natural y no es abrumador, pero no deja de dar vueltas en mi cabeza la posibilidad de quedar en el olvido (años o meses) sin que se mantenga presente una anécdota mía, un recuerdo o un legado......... ¡cuestiones de la vida real!
Relato basado en la vida real @anecdotas
Crédito de esta imagen de bongkarngraphic