Un placer saludar a todos los hiver que hacen vida en esta hermosa comunidad, hoy quiero compartir con todos ustedes una reflexión motivada por un suceso que viví esta semana, y me movió a expresarlo en estas líneas en forma de cuento, espero les guste.
En un pequeño pueblo costero, donde las olas besaban suavemente la orilla y el sol se despedía cada día con un abrazo cálido, vivía un anciano relojero llamado Mateo. Su tienda era un cofre de tesoros, lleno de relojes de todas formas y tamaños, pero entre todos, uno resaltaba: un antiguo reloj de arena.
A pleasure to greet all the hiver that make life in this beautiful community, today I want to share with all of you a reflection motivated by an event that I lived this week, and moved me to express it in these lines in the form of a story, I hope you like it.
In a small seaside town, where the waves gently kissed the shore and the sun said goodbye every day with a warm embrace, lived an old watchmaker named Mateo. His store was a treasure chest, full of clocks of all shapes and sizes, but among them all, one stood out: an antique hourglass.
Un día, una niña llamada Lucía entró a la tienda, atraída por el brillo del cristal. “¿Cómo funciona este reloj?” preguntó con curiosidad.
Mateo sonrió y le explicó: “Este reloj mide el tiempo de una manera especial. No cuenta minutos ni horas, sino momentos. Cada grano de arena representa un momento de nuestras vidas.”
Lucía observó fascinada cómo los granos caían uno a uno, formando un pequeño montículo dorado. “¿Y qué sucede cuando todos los granos han caído?” preguntó.
“Entonces, damos vuelta al reloj y comenzamos de nuevo. Así es la vida, llena de ciclos y nuevos comienzos,” respondió Mateo.
One day, a little girl named Lucia came into the store, attracted by the sparkle of the crystal. "How does this watch work?" she asked curiously.
Mateo smiled and explained, "This watch measures time in a special way. It doesn't count minutes or hours, but moments. Each grain of sand represents a moment in our lives."
Lucia watched in fascination as the grains fell one by one, forming a small golden mound. "And what happens when all the grains have fallen?" she asked.
"Then we turn back the clock and start all over again. That's life, full of cycles and new beginnings," replied Mateo.
La niña reflexionó sobre las palabras del relojero y se fue a casa, llevando consigo la imagen del reloj de arena. Esa noche, Lucía soñó con el tiempo, con los momentos felices y tristes, y con los ciclos que formaban su vida.
Al día siguiente, Lucía regresó a la tienda y le dijo a Mateo: “Quiero aprender a apreciar cada grano de arena, cada momento.”
Mateo, con una sonrisa sabia, le entregó un pequeño reloj de arena. “Llévalo contigo y cada vez que necesites recordar la importancia de un momento, dale la vuelta.”
Lucía abrazó el reloj y corrió hacia la playa, donde el tiempo parecía detenerse. Se sentó en la arena, observando el horizonte, y dio vuelta al reloj. Con cada grano que caía, pensaba en un recuerdo, en una lección aprendida, en una sonrisa compartida.
The little girl reflected on the watchmaker's words and went home, taking the image of the hourglass with her. That night, Lucia dreamed about time, the happy and sad moments, and the cycles that made up her life.
The next day, Lucia returned to the tent and said to Mateo, "I want to learn to appreciate every grain of sand, every moment."
Mateo, with a knowing smile, handed her a small hourglass. "Carry it with you and every time you need to remember the importance of a moment, turn it over."
Lucia hugged the watch and ran to the beach, where time seemed to stand still. She sat on the sand, watching the horizon, and turned the watch over. With each falling grain, she thought of a memory, a lesson learned, a shared smile.
Los días pasaron y Lucía creció, pero el reloj de arena siempre estuvo con ella, recordándole que cada momento era valioso. Aprendió a vivir con atención plena, a no dar por sentado el tiempo y a valorar las pequeñas cosas.
El reloj de Mateo, sin embargo, seguía en su tienda, esperando a que otros descubrieran su gran valor. Y aunque el relojero ya era muy viejo, su corazón se mantenía joven, alimentado por los momentos que había atesorado a lo largo de su vida.
Days passed and Lucia grew up, but the hourglass was always with her, reminding her that every moment was precious. She learned to live with mindfulness, to not take time for granted and to value the little things.
Mateo's watch, however, was still in his store, waiting for others to discover its great value. And although the watchmaker was now very old, his heart remained young, nourished by the moments he had treasured throughout his life.
Una tarde, Lucía, ya convertida en una mujer sabia y reflexiva, visitó la tienda una vez más. Mateo ya no estaba, pero en su lugar, había una nota: “El tiempo es el regalo más precioso. Úsalo con sabiduría.”
Lucía tomó el reloj de arena grande y lo colocó en el centro de la tienda, ahora suya. Con cada grano que caía, recordaba al viejo relojero y sonreía, sabiendo que la vida es un conjunto de momentos efímeros, cada uno merecedor de ser vivido plenamente.
One afternoon, Lucia, now a wise and thoughtful woman, visited the store once again. Mateo was gone, but in his place, there was a note: "Time is the most precious gift. Use it wisely."
Lucia took the large hourglass and placed it in the center of the tent, now hers. With each falling grain, she remembered the old watchmaker and smiled, knowing that life is a collection of fleeting moments, each worthy of being lived to the fullest.
Banner elaborado por mí en PowerPoint 1, 2. 3, 4.
El separador fue tomado de Pixabay.
The separator was taken from Pixabay
Imágenes generadas con AI Dall-E 3
Images generated with AI Dall-E 3
Una bella reflexión sobre el valor del tiempo, me encantó el mensaje de ver cada instante como cada grano de arena que cae. Felicidades por tan bonito escrito.
Saludos querido amigo.
Hay un Manhwa muy famoso que regresa a una princesa al pasado para ella vengarse de su hermana. Es muy irónico al leerlo me hizo recordarlo.
Excelente reflexión @loboblanco🌟... definitivamente el tiempo es nuestro más valioso recursos, de allí la importancia de saberlo valorar y gestionar 🙌
¡Saludos! ❤️
Esta publicación ha recibido el voto de Literatos, la comunidad de literatura en español en Hive y ha sido compartido en el blog de nuestra cuenta.
¿Quieres contribuir a engrandecer este proyecto? ¡Haz clic aquí y entérate cómo!