Fuente«Soledad: Un instante de plenitud».
«Solitude: An instant of fullness».
— Michel de Montaigne
E S P A Ñ O L
NO MENCIONES A MATILDA
A mis padres no les agradaba la idea de que jugara con Matilda, pues decían que era una niña muy extraña y no querían que me contagiara de su locura. Por un tiempo, llegué a evitarla y encima la miraba con desprecio. Cada vez que se cruzaba en mi camino, escupía y daba media vuelta para tomar otro trayecto. Mi desprecio hacia ella era de un chiquillo antipático e inmaduro, pero las cosas cambiaron, sobre todo cuando fui casi testigo de lo que pasó.
Recuerdo que estaba con unos amigos caminando hacia los lados del riachuelo. Estábamos pasándola bien, contando historias y chistes sobre las personas del pueblo. Pero el momento se arruinó cuando uno de los chicos mencionó el nombre de Matilda. Todos nos quedamos cabizbajos. Alicia, quien vivía justo al lado de la casa de esa chica, comenzó a ponerse nerviosa y se aislaba del grupo.
Los demás se miraron mostrando rostros serios. Yo traté de tranquilizarme y fui con Alicia para intentar calmarla. El tema de Matilda le afectó más de lo que imaginaba, por alguna razón que ella no quería confesar, quizás por ser vecina de esa familia tan rara ha visto cosas que la traumatizaron, ¿qué cosas serían?, lo único que escuchaba eran historias de odio de mis padres, pero estaba seguro en ese momento que no es ni la cuarta parte de lo que habrá visto Alicia.
Hice que la chica siguiera con nosotros y todos olvidamos el tema de Matilda, terminamos la tarde pasándola bien y cada quien se fue para su casa. Acompañé a Alicia hasta la suya, era la misma dirección hasta la mía, la cual quedaba a solo dos cuadras de ahí. Después de despedirnos, me dirigí a mi casa tranquilo, pero comencé a caminar lentamente frente a la casa de Matilda.
Ella estaba allí, sentada frente a su pórtico observándome mientras sostenía algo con sus brazos. Yo la vislumbré con estupor, me distraje por un momento ya que mi celular sonaba, al revisarlo, me di cuenta que era mi madre quien me llamaba. Desvié la llamada pues no quería exponer mi celular por esa zona, y al levantar la mirada, Matilda estaba justo enfrente de mí, mirándome de cerca con sus ojos lagañosos y cansados, con harapos sucios como vestimenta y el pelo enmarañado.
Quedé petrificado, pues pensé que no podía escapar, cuando de pronto dejó caer lo que sostenía con sus brazos envuelto en trapos manchados. Logró sobresalir, y espantando me di cuenta de que se trataba de un brazo humano. Ella se rio a carcajadas, y yo inundado por el miedo escapé despavorido sin mirar atrás. Al llegar, mi madre me observó preocupada pues el corazón se me iba a salir del pecho. Me preguntó varias veces alarmada por mi estado, pero yo sentía que me faltaba la voz. Hasta que, finalmente le confesé lo que había visto. Ella inmediatamente llamó a la policía, tanto mi madre como mi padre no dudaban de las cosas que era capaz esa extraña chica.
Las autoridades llegaron de inmediato y, al penetrar el recinto, se encontraron un escenario de horror. Dos cuerpos desmembrados sobre la mesa del comedor, les habían abierto por la mitad en el medio y expuesto sus entrañas; eran los padres de Matilda. La chica fue detenida, la gente que atestiguó su arresto dice que no dejaba de sonreír; como si no estuviera arrepentida, sino que, todo lo contrario.
Pasaron dos años después de ese evento, la gente días después creaba leyendas urbanas sobre la asesina más diabólica que vivió por este barrio. Algunos usaban este cuento para asustar a los niños, otros aseveraban que Matilda había escapado de prisión, y que cuando ocurría un asesinato en la ciudad era obra de ella. De cualquier forma, los que la conocimos, prometimos olvidarla, pero Alicia nunca lo hizo, quien les recuerda a los vecinos no mencionar el nombre de Matilda, pues, así como desapareció de nuestras vidas, podría volver abruptamente como solo ella lo sabe hacer.
FIN
E N G L I S H
DO NOT MENTION MATILDA
My parents didn't like the idea of me playing with Matilda, because they said she was a very strange child and they didn't want me to catch her craziness. For a while, I avoided her and looked down on her. Every time she crossed my path, I would spit and turn around and go another way. My contempt for her was that of an unfriendly and immature little boy, but things changed, especially when I almost witnessed what happened.
I remember I was with some friends walking along the side of the creek. We were having a good time, telling stories and jokes about the people in town. But the moment was ruined when one of the boys mentioned Matilda's name. We all looked crestfallen. Alicia, who lived right next door to that girl's house, started to get nervous and isolated herself from the group.
The others looked at each other with serious faces. I tried to calm down and went to Alicia to try to calm her down. Alicia's subject affected her more than I imagined, for some reason she didn't want to confess, maybe for being a neighbor of that weird family she has seen things that traumatized her, what things would they be, the only thing I heard were stories of hate from my parents, but I was sure at that moment that it is not even the fourth part of what Alicia will have seen.
I made the girl continue with us and we all forgot about Matilda, we finished the afternoon having a good time and everyone went home. I accompanied Alicia to hers, it was the same address as mine, which was only two blocks away. After saying goodbye, I went home calmly, but I started to walk slowly in front of Matilda's house.
She was there, sitting in front of her porch watching me while holding something in her arms. I glimpsed her with amazement, I was distracted for a moment as my cell phone rang, when I checked it, I realized it was my mother calling me. I diverted the call as I didn't want to expose my cell phone in that area, and when I looked up, Matilda was right in front of me, looking at me closely with her tired, haggard eyes, with dirty rags for clothes and matted hair.
I was petrified, for I thought she could not escape, when suddenly she dropped what she held in her arms wrapped in stained rags. It managed to stick out, and I realized that it was a human arm. She laughed out loud, and I, flooded with fear, ran away terrified without looking back. When I arrived, my mother looked at me worried because my heart was about to burst out of my chest. She asked me several times, alarmed by my condition, but I felt that my voice was failing me. Until, finally, I confessed to her what I had seen. She immediately called the police, both my mother and father did not doubt the things this strange girl was capable of.
The authorities arrived immediately and, upon entering the premises, found a scene of horror. Two dismembered bodies on the dining room table, they had been cut open in the middle and their entrails exposed; they were Matilda's parents. The girl was arrested, the people who witnessed her arrest say that she kept smiling; as if she was not sorry, on the contrary.
Two years passed after that event, people days later created urban legends about the most diabolical murderer who lived in this neighborhood. Some used this story to scare children, others claimed that Matilda had escaped from prison, and that whenever a murder occurred in the city it was her work. In any case, those of us who knew her, promised to forget her, but Alicia never did, who reminds the neighbors not to mention Matilda's name, because, just as she disappeared from our lives, she could return abruptly as only she knows how to do.
THE END
Written by @universoperdido. January 19, 2022
Escrito por @universoperdido. 19 de enero del 2022
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Aterradora e impresionante historia. Tienes un talento increíble para en pocas palabras desenvolver historias grandiosas. ¡Me gustó mucho tu post! ❤️
¡Muchas gracias por tu comentario!
Estoy tratando de seguir un estilo de escritura más suave y, la verdad, quedé bastante conforme.
¡Saludos!
Concentras una atmósfera de misterio, asombro y miedo en pocas palabras. Magnifico. Lee esto @franvenezuela, @violetaperez, @tomasjurado.
¡Gracias, @jesuspsoto !
El misterio narrado con la sutileza del lenguaje, para el bien del lector. Excelente relato.
¡Gracias por el comentario!
Un cadena de imágenes donde el misterio juega con nuestra mente, la curiosidad alimenta la ansiedad por el desenlace y una narrativa que logra inmiscuirnos en el relato. Gracias por compartirlo