Les cuento que ayer fue el día de mis felices y bendecidos 39 años, por supuesto que estoy gratamente agradecida con Dios, la vida y el universo.
Con el pasar de los días, las pruebas y experiencias que adquirimos vamos creciendo como personas y seres humanos, claro todo depende las decisiones que vamos tomando en el camino, depende de ellas, nos vamos formando en la escuela de la vida.
Para mí, cada año cumplido, es un recordatorio de que nuestro paso por este mundo es fugaz, así que no debemos dejar que pase en vano, debemos ser lo más feliz posiblemente cada día, y de paso regalar parte de esa felicidad a todos a nuestro alrededor.
Debemos tener presente que no es la cantidad de años que cumplimos, más bien es la cantidad de años que nos va a regalar aun el universo, porque nunca debemos olvidar que somos finitos en este cuerpo.
Así que perdonemos lo que tengamos que perdonar, soltemos lo que tengamos que soltar, y sigamos adelante disfrutando lo maravilloso que podemos hacer nuestro día a día.
Doy gracias infinitas a esta vida, y estoy agradecida con todas las enseñanzas que me ha regalado cada día vivido hasta el día de hoy, desde aquí les digo vivan, vivan, vivan, y no dejen nada para después, que no sabes hasta cuándo tendremos esta maravillosa oportunidad de vivir.
Gracias por leerme.
I tell you that yesterday was the day of my happy and blessed 39 years, of course I am pleasantly grateful to God, life and the universe.
With the passing of the days, the trials and experiences we acquire, we grow as people and human beings, of course everything depends on the decisions we make along the way, it depends on them, we are being formed in the school of life.
For me, each completed year is a reminder that our passage through this world is fleeting, so we must not let it pass in vain, we must be as happy as possible every day, and incidentally give part of that happiness to everyone around us.
We must keep in mind that it is not the number of years we have, but rather the number of years that the universe will give us, because we must never forget that we are finite in this body.
So let's forgive what we have to forgive, let go of what we have to let go of, and let's move forward enjoying the wonderful things we can do day by day.
I give infinite thanks to this life, and I am grateful for all the teachings that each day has given me until today, from here I say live, live, live, live, and do not leave anything for later, you do not know until when we will have this wonderful opportunity to live.
Thanks for reading me.