La vida es tan difícil la mayoría de nuestros días que solo saber que puedes contar con una pequeña cerveza, hace que todo sea mas ligero.
Un placer económico.
Cuando era más joven solía tomar muchísima cerveza los fines de semana, pero ahora me doy cuenta que no la valoraba ni disfrutaba como debía.
Foto de mis álbum de recuerdos
Tomada de mi teléfono.
Beber por beber, en la juventud es lo más común.
Pero de adulta he aprendido a valorarla, amarla, conocerla, variarla y disfrutarla, así sean pocas al mes.
Me emociona que llegue el fin de semana, llegar a un supermercado y elegir una cerveza nacional o importada y que maride con lo que quiera cocinar ese día o simplemente que llame mi atención y después inventar en la cocina.
Este fin compramos un six pack de cerveza nacional, es de la fábrica regional en Venezuela y se llama Morena. Esta cerveza es tipo lager de 5°. Debo admitir que tenemos dos meses solo eligiendo esta.
Cómo estuvimos ocupados nos rindió para tres cenas, una por día. Y cada día dependiendo de la comida tomaba una sabor distinto.
El primer día acompañamos la cerveza con alitas al limon, papás en crema con cebolla caramelizada, y una ensalada mixta con tomates confitados y pesto. Ese día la cerveza me sabía un poco fuerte y amarga.
El segundo día, lo acompañamos de bisteck, con ensalada mixta y yucas fritas. Este fue mi modo favorito de acompañarla. Estaba perfecta esa combinación, se sentía un sabor suave y costoso.
Y anoche la última cerveza nos la tomamos después de una sopa de costillas de res, y un día agotador de grabación de vídeo, y el cierre de una semana loca. Dormí como los Dioses después de esa cerveza y unas canciones de A-ha. Así que no sabría decirles si fue la combinación más rica, pero de algo que si estamos seguros es que fue la más placentera.
Así que como ya empezamos las navidades, no veo mal comprar una cerveza para cada día.
Una al día no hace daño y más si te regala una liberación de estrés increíble.
Te amo cerveza, gracias por aligerar la carga de nuestros días. Y Lamento no haberte apreciado antes, espero hacer una cata de ti, para conocerte y saber con qué combinas o maridas apropiadamente.
Les debo las fotos, en esta oportunidad no las tome y solo me dedique a disfrutar del momento, algo que se ha vuelto rutinario en mi vida. Quizás es la edad o que ya estoy apreciando las mejores cosas de la vida.