La realidad es que Vilda no sacó a varias de las jugadoras; el pasado año despues de un muy mal manejo del grupo en la Eurocopa, 15 jugadoras pidieron un cambio radical en el manejo de la selección, pidieron que se mejorará una serie de ámbitos y preferían no ser convocadas hasta que esas peticiones se cumplan; la RFEF vio esa petición válida como un chantaje y se usó a medios de comunicación para hacer ver a las 15 mujeres como enemigas; ahora al ver los éxitos en las categorías SUB17 y SUB20, Vilda decidió integrar a esas jóvenes jugadoras al grupo, pero que pasa, todavía no había ningún cambio, pero al acercarse el mundial, la RFEF aceptó realizar varios cambios, los cuales en esta oportunidad se mantuvieron en silencio, sin el boom de la prensa para no verse débiles y eso hizo que varias de las 15 jugadoras, regresarán a la selección.
Este es un tema fuerte, no existe un pleno de felicidad, no para jugadoras que seguramente no vuelvan a jugar con la selección, mientras Vilda y Rubiales se quieren llevar todo el crédito por el todavía mal trabajo que hacen en el fútbol femenino. Hasta hoy existe controversia por los actos realizados en la final.