El problema de la nostalgia, en mi caso particular, es que me aplana un poco emocionalmente, claro está, no hasta el punto de no querer hacer nada, porque si fuese así, el día de hoy no estaría publicando este escrito, pero se siente como un bajón en el ánimo. Los recuerdos te permiten viajar mentalmente, aparte de traer a memoria, también sientes quizás alegría, tristeza, gozo, euforia, rabia, frustración, en fin un sin número de emociones que te activaran o aplanaran.
Empezaré a contarles qué momentos o qué cosas extraño:
Las salidas familiares, como por ejemplo ir a la playa y/o viajes largos (más de una semana). Siempre se planificaban con anticipación, para prepararnos económicamente con los alimentos y bebida que se llevarían, nunca hemos salido de manera improvisada, de verdad nunca he vivido esa experiencia. Mi papá es un militar de la “vieja escuela”, todo se debe planificar, casi que estratégicamente jajajaja, para que no tuviésemos contratiempos de último minuto, y gracias a Dios todo salía bien, esto no quiere decir, que una salida improvisada sea desagradable, pero nosotros nos acostumbramos a planificar.
MI PAPÁ DISFRUTANDO DE UN DÍA DE PLAYA CON SUS NIETOS
Otro momento que quisiera volver a vivir son las escapaditas con mi esposo, ajaaa, no vayan a pensar mal, hace varios añitos, teníamos salidas los viernes en la noche, a comer, a tomarnos unos traguitos, luego de una rica conversa, nos regresábamos a casa renovados y felices. Aclaro nuevamente, no me vayan a malinterpretar, en un matrimonio, de vez en cuando una salida juntos, es de gran bendición, porque rompe la cadena que envejece la relación, la tan temida RUTINA
SALIDA ROMANTICA DE ESTA LINDA PAREJITA
Recuerdo con mucho amor un viaje que mi esposo planificó para un día después de mi cumpleaños, me regaló o nos regalamos un fin de semana en la preciosa Isla de Margarita, fue una experiencia demasiado hermosa, la comida, el hotel, fue emocionante desde que nos montamos en el ferry, hasta que regresamos
VIAJE SORPRESA PARA LA ISLA DE MARGARITA
Otros momentos para recordar son las sabrosas y divertidas celebraciones de cumpleaños, hay... que de recuerdo, como dice mi esposo, “No nos pelábamos una celebración”, igual que en las salidas familiares, mi papá tomaba la batuta y nos sentábamos a planificar la comida, la bebida, los pasapalitos, a quién invitaríamos, como les comenté antes, para que nada quedara fuera de control jajaja.
Recuerdo uno de mis cumpleaños, mi esposo siempre romántico y enamorado, nos sorprendió y en especial a mí, con una serenata, un dúo que canta balabas, super romanticas, tipo Dani Rivera y las rancheras de Javier Solís y Pedro Infante, estaba que me derretía de amor, fue un hermoso momento que disfrutamos en familia, gracias a Dios.
Como olvidar las salidas relámpagos a comer, siempre íbamos mi hermana, mi mamá y yo, aún no me había casado y no tenía a mi hijo. Por lo menos una vez a la semana salíamos a comer perros calientes, parrillitas, o ensalada cesar (una para cada una) o comprábamos un carpaccio de lomito, unos pancitos y refresco, todo esto para comerlo en casa, se podía porque estábamos solteras y no teníamos grandes responsabilidades.
No todo mi relato tiene que ver con salidas y gastar dinero, también recuerdo con nostalgia, una planta que tenía mi abuela materna, cuando ella vivía en Caracas, era una matita que floreaba de manera extraña, primero la flor parecía plástica, color rosado, pero a medida que avanzaba el proceso, iba cambiando de aspecto, a un color blanco muy hermosa, la pueden ver en la siguiente foto.
En la primera foto pueden ver la flor en sus dos maneras como se las describí, y el segunda la pueden ver en su forma definitiva, goteando un liquido dulce que atrae a los insectos inofensivos, es demasiado hermosa, quizás en foto no se aprecia lo linda que es, a mi me encanta. Si sabes el nombre de la matita, agradezco me lo comuniquen pues no lo sé.
La lista es muy larga, le doy gracias a Dios por haberme permitido vivir cada momento, y los que El tiene preparados para mí y mi familia, no soy de las personas que piensa y declara “Que tiempos aquellos... tiempos que no volverán”. Creo firmemente en la fidelidad de Dios, creo que El siempre es bueno y nunca nos deja en vergüenza.
Si bien es cierto que la pandemia trajo aislamiento, no poder darnos un buen abrazo apretaiitoo, y dejar las visitas a familiares y amigos para otro momento. Que la crisis económica que vive el país ha traído como consecuencia que dejemos de viajar, comer en restaurantes, reunirnos en familia con la frecuencia que uno espera y quiere, también es verdad y lo creo ciegamente que mi Dios Padre me dice en Su palabra en:
1 CORINTIOS 2:9
sino como está escrito: «Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, Ni han entrado al corazón del hombre, Son las cosas que Dios ha preparado para los que lo aman».
HAGEO 2:9
La gloria postrera de esta casa será mayor que la primera, ha dicho Jehová de los ejércitos; y daré paz en este lugar, dice Jehová de los ejércitos.
Estas palabras me inyectan confianza en mi Dios, creo en El y sé que todas estas situaciones pasaran y que viviremos tiempos mejores… AMÉN Y AMÉN
Apoyando esta publicación
Buenas noches, agradecida @marlui por apoyar mi publicación, cada día intentado dar lo mejor de mi mente y corazón, Dios le continue bendiciendo.
Con el apoyo de la familia.
Trail de TopFiveFamily
Guardar buenos recuerdos para revivirlos en el tiempo es una de las formas más bonitas
para superar los malos momentos. Y por supuesto, la fe ayuda a superar o que no podemos cambiar.
Un abrazo