Todas las fotos son de mi propiedad
Los cambios
Ciertamente, nuestros hijos no se van a quedar siendo bebés para siempre; ni estarán en nuestros brazos porque un día aprenden a caminar y ya no quieren que mamá los cargue. Muchas veces dicen que aprovechen cada etapa de los hijos porque después crecen y el tiempo no vuelve a atrás.
Sin embargo, esta época en la que no somos solo ama de casa y esposas sino mamá, maestra, pediatra y ejercemos una profesión; porque toca trabajar también y además nos gusta, entonces no es un tiempo completo dedicado a los hijos, pero lo intentamos a toda costa porque no dejan de ser prioridad en nuestra vida, así son mis hijas para mí, lo más importante.
Al recordar la etapa de recién nacida de mis hijas, sus primeros meses entre muchas cosas no olvido su olor, porque cierro los ojos y era tan agradable, sublime casi que el mejor aroma del mundo; si exagerado debe sonar, pero el olor de mis niñas era un sueño y sus pies, manos, la carita toda completa era el más agradable, quería abrazarlas y tenerlas cerca siempre. Así comenzaron a hablar, caminar, leer y luego a ser cada vez más independientes, llegan los cambios más visibles a la edad de los 11 años, comienza, si la adolescencia, señores, esto es un tema.
Mis hijas no han sido la excepción y han cambiado, no son adultas, pero sí que noto mucho; no querer fotos ni solas ni con sus papás ya no le gustan. Allí está mi pequeña Victoria hoy con 16 años y pasa más tiempo conversando con las amigas que conmigo, sale más con ellas y mamá ya no tanto. No dudo de su amor, de su respeto, de nuestra complicidad, sí que ha cambiado. Ambas, pero hoy me refiero solo a una de mis niñas, la mayor.
Sin dudas crecemos demasiado rápido ante los ojos de los padres.
Cierto, lo que debemos hacer es tratar de disfrutar al máximo de cada etapa y tratar de no perderte tanto.
Saludos @lupetorres.
Exactamente por esas cosas que describes, he pasado la mayor parte del tiempo con mis hijos, antes, precisamente que lleguen a jóvenes-adultos y ya no quieran ver conmigo una peli «por ejemplo». Pero, así son estos tiempos y debemos adaptarnos. No es que ellos al crecer no nos quieran, es que ellos saben que nosotros siempre estaremos allí... Un abrazo en la lejanía. Bendiciones.
Hola @amigoponc
Sí, parece que así es y debemos aceptarlo, pero sí que cuesta y hace falta siempre tener a mis niñas en mis brazos. Las extraño cuando salgo al supermercado porque ya no quieren ir.
Gracias por tus bendiciones.