Hola queridos amigos de Top Family, hoy estoy muy contenta de participar en esta iniciativa semanal sobre el #tbt y poder compartir con todos una foto y una historia.
Marcela, Miranda, Copito y yo en el 2021.
El abuelo paterno de mis hijas es un hombre al que le gusta mucho la siembra y la cría de animales, su casa era una especie de zoológico, huerto, y lugar de encuentros los domingos. Cuando mis hijas estaban mas pequeñas e íbamos a visitar, lo primero que hacían era correr al corral de los chivos y perseguir a todos los más pequeños para tratar de agarrarlos. Ellas los veían como juguetes, o peluches, y los pobres chivitos corrían y saltaban de miedo por todos lados. Ese día del año 2021 fuimos a despedir al abuelo Cheo que emigraba a Ecuador, fue un día de lágrimas y tristeza, sabíamos que no lo veríamos en un buen tiempo pero el decidió a última hora regalarle ese chivito de la foto a Marcela y a Miranda, ellas inmediatamente lo bautizaron como "Copito", entonces estuvieron tristes por la despedida del abuelo pero felices porque ese día nos lo llevamos a casa y fue el comienzo de una aventura.
Copito se comió todas las flores de la casa de mi mamá, y dejaba sus desechos por todos lados, ellas jugaban con el pero lo tuvimos que encerrar, entonces ellas le llevaban comida y agua y cuidaron de el hasta que creció, estaba solito y decidimos regalarlo a un familiar que tiene mas animales, también porque ya era hora de mudarnos a nuestra propia casa y en la Urbanización no permiten la tenencia de este tipo de mascotas. De vez en cuando lo recordamos porque fue un regalo especial de su abuelo, y todavía lo vemos en el patio de mi tío pero ya no es nuestra mascota. Aun así sigue siendo un #tbt especial porque la alegría y sonrisas de mis hijas siempre será magia para mi.