Gracias por el premio, fue grato participar y compartir en esta comunidad. Aquí les dejo mi participación de esta semana:
Gael salió temprano aquella mañana, apenas vio la luminiscencia se puso los zapatos deportivos y se marchó. No tenía suficiente dinero en efectivo para el transporte público, así que caminaría hasta su destino. Transcurridas unas horas, estaba exhausto. Al pasar por un establecimiento de venta de comida, recordó esa malta que reposaba en su nevera, además de refrescarse y reponer energías fortalecería sus huesos, tal como su mamá se lo decía. En ese momento cavilaba en los beneficios de consumirla a diario y la imaginaba vestida de novia, con su dulce sabor en las papilas gustativas. Quiso hacer ese pensamiento realidad, apuró el paso para llegar a casa.