¿Qué son los libros prohibidos?
¿Cuánta verdad hay oculta, tras el velo casi translúcido del mito y las sombras en cuanto a libros que encierran una maldad que haría estremecer al más cruel de los psicópatas? La historia de la humanidad se escribe a través de misterios y verdades, donde la realidad se liga en prosa y verso con la ficción. Y todo lo que se ponga en palabras y se pueda poner sobre papel adquiere un peso mágico de materialización. Por eso hablar de los libros malditos siempre se puede hacer de dos formas: una desde la realidad confirmada, siendo estrictamente escépticos con nuestras palabras; la otra, y quizás la favorita de muchos, dejándonos llevar por la imaginación y atribuyendo nuevas historias que enriquezcan el universo de misticismo tras el libro. Si hoy me acompañas, me permitirás mezclar ambas formas de contar. Espero que disfruten de mis palabras y atribuciones y, sobre todo, que salgan ilesos.
No todo libro maldito tiene que ser antiguo, pero es quizás la lejanía del tiempo lo que más hace que un libro se pierda en el camino y deje paso a teorías inciertas o verdaderas. Comencemos hablando de un libro que, para algunos, con solo escuchar su nombre hace que se vean las figuras humanas más transmutadas y terroríficas, mientras para otros vean un tratado de un valor incalculable de un tiempo donde ciencia y magia iban de la mano. "La Clave Menor de Salomón" es conocido por muchos como el "Lemegeton". Cuentan que en sus páginas se desafiaba la realidad y se mezclaba contenido esotérico con magia, medicina y maldiciones. Muchos ocultistas han quedado fascinados a través de copias actuales de dudosa procedencia, siendo quizás el grimorio más buscado durante siglos. Algunos lo atribuyen como obra directa de la mano del rey Salomón en una recopilación de su vida y estudios, mientras otros aseguran una antigüedad casi mayor cercana al origen de la escritura. El Lemegeton en sí es la compilación de cinco libros, siendo el más conocido el "Libro de Ars" que tiene la capacidad de enseñar hechizos de invocación y control de criaturas demoníacas. Para ser exacto, muestra cómo invocar a 72 demonios y los pasos a seguir para pactar con ellos o controlarlos. Sin dudas constituye un libro a ser temido y que encierra un gran poder que pudiera devenir en desastre si la persona equivocada se hace con su comprensión. Aunque todo aquel que ha tratado de usarlo cuenta que ha sucumbido ante muertes extrañas o dolorosas, quizá por la debilidad de la misma naturaleza humana ante un poder que no puede comprender. Los rituales en sus páginas exigen un nivel de conocimiento de varias ciencias ocultas a profundidad y de seguir instrucciones complicadas al pie de la letra y sin errores, con una precisión sobrehumana. Todo el que se atreve a usar tal conocimiento tiene que saber que no solo pone en juego su integridad física sino su alma, consecuencias que van más allá de nuestra comprensión.
Y no me gustaría pasar por alto otro grimorio lleno de igual misterio y que lo precede una fama quizás mayor: el "Libro de Soyga". Su descubrimiento se debe a la labor del ocultista John Dee alrededor del siglo XVI. Lo más misterioso de todo el libro es el lenguaje, hasta la fecha desconocido y prácticamente incomprensible más no ilegible, que atesora sus páginas. Pareciera de por sí una recopilación de datos y estudios de magia, esoterismo, ocultismo, astrología, herbología y cualquier ciencia perdida que se nos venga a la cabeza, porque puede ir de un punto a otro con solo una página de diferencia, lo que aumenta aún más la dificultad de su comprensión. Sobresalen en él rituales arcanos, runas y simbología, así como tablas criptográficas. El propio Dee dedicó su vida a intentar descifrar todo su contenido, pero solo logró conseguir su muerte y el descontento de no descifrar ni una sola palabra. Su misteriosa muerte, precedida por fenómenos paranormales y visiones constantes, ayudó a que el libro adquiriera un tono aún más de maldición y fatalismo, provocando en muchos el terror y en otros la necesidad de obtenerlo a cualquier precio.
Hasta el día de hoy su origen se sigue debatiendo a la par que su propósito y dueño original. Algunos creen que quien domine los conocimientos prohibidos de sus páginas recibirá el don de la inmortalidad y el conocimiento absoluto de las leyes del universo, un poder increíble que vendrá de la mano con un coste terrible. Otros lo ven como un acercamiento al pasado y a conocimientos perdidos que podrían incluso hoy ser la solución para muchos problemas modernos.
Tal vez el mayor misterio es su prácticamente imposibilidad de traducción, así como las constantes desapariciones y apariciones tanto del original como de sus copias. Otros prefieren y aseguran que es mejor su destrucción, pues puede ser demasiado peligroso como para que su contenido sea revelado.
Sin dudas, ambos libros son impresionantes e impactan todo el misterio y terror que guardan. Quizás sea el Lemegeton el más peligroso hasta el momento por su precisión y detalle en las descripciones de rituales demoníacos de invocación y control de seres de otras dimensiones. Pero el Libro de Soyga tiene aún más misterio, un misterio más aterrador en su propia falta de comprensión y lo poco que podemos dimensionar el contenido de sus páginas.
Por supuesto que es imposible determinar si estos libros son falsos o verdaderos. Quizás para algunas personas solo serán simples leyendas o el producto de la imaginación y creencias mágicas de los hombres del pasado, pero para otros estos libros seguro encerrarán un terrible o deseable poder y efectividad, y lo verán como un mecanismo tanto para el bien como para el mal. Tan subjetiva es la veracidad y realidad de su contenido como lo es nuestra propia existencia o la existencia de un mundo oculto. Quizás en algún momento seamos capaces de comprender todo su contenido y estudiarlo, pero sería imposible no pensar en los límites de una exploración ética a través de principios morales, haciéndonos la pregunta: ¿Hasta dónde estaríamos dispuestos a llegar por adquirir este conocimiento? Estos rituales, códices y conocimientos pueden ser percibidos por la mayoría como amenazas para el orden ya establecido y la seguridad personal.
Por ahora limitemos a la fascinación y la idea de que estos libros, malditos o no, existen y están ahí a la espera de que la curiosidad humana los redescubra ocultando a la vista verdades peligrosas o poderosas, verdades que debemos ver al menos con un mínimo de respeto. Su reputación como libros malditos son un recuerdo de la propia búsqueda del conocimiento, el poder y la sabiduría que es innata a los seres humanos, más allá de sus creencias.
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What are the forbidden books?
How much truth is hidden behind the almost translucent veil of myth and the shadows of books that contain an evil that would make the cruelest of psychopaths shudder? The history of mankind is written through mysteries and truths, where reality is linked in prose and verse with fiction. And everything that is put into words and can be put on paper acquires a magical weight of materialization. That is why talking about cursed books can always be done in two ways: one from the confirmed reality, being strictly skeptical with our words; the other, and perhaps the favorite of many, letting ourselves be carried away by the imagination and attributing new stories that enrich the universe of mysticism behind the book. If you join me today, you will allow me to mix both ways of telling. I hope you enjoy my words and attributions and, above all, that you come away unscathed.
Not every cursed book has to be ancient, but it is perhaps the remoteness of time that most causes a book to fall by the wayside and give way to uncertain or true theories. Let's start by talking about a book that, for some, just by hearing its name makes them see the most transmuted and terrifying human figures, while for others they see a priceless treatise from a time when science and magic went hand in hand. “The Lesser Key of Solomon” is known to many as the ‘Lemegeton’. It is said that its pages challenged reality and mixed esoteric content with magic, medicine and curses. Many occultists have been fascinated by current copies of dubious provenance, being perhaps the most sought after grimoire for centuries. Some attribute it as the direct handiwork of King Solomon in a compilation of his life and studies, while others claim an almost greater antiquity close to the origin of writing. The Lemegeton itself is the compilation of five books, the best known being the “Book of Ars” which has the ability to teach spells of summoning and controlling demonic creatures. To be exact, it shows how to summon 72 demons and the steps to follow to pact with them or control them. It is undoubtedly a book to be feared and holds great power that could lead to disaster if the wrong person gets a hold of it. Although all those who have tried to use it say that they have succumbed to strange or painful deaths, perhaps due to the weakness of human nature itself before a power it cannot understand. The rituals in its pages require a level of knowledge of various occult sciences in depth and to follow complicated instructions to the letter and without mistakes, with superhuman precision. Anyone who dares to use such knowledge must know that not only his physical integrity but also his soul is at stake, consequences that are beyond our comprehension.
And I would not like to overlook another grimoire full of equal mystery and preceded by perhaps even greater fame: the “Book of Soyga”. Its discovery is due to the work of the occultist John Dee around the 16th century. The most mysterious thing about the whole book is the language, so far unknown and practically incomprehensible but not unreadable, which treasures its pages. It seems in itself a compilation of data and studies of magic, esotericism, occultism, astrology, herbology and any lost science that comes to mind, because it can go from one point to another with only one page difference, which further increases the difficulty of understanding. Arcane rituals, runes and symbology stand out in it, as well as cryptographic tables. Dee himself dedicated his life to trying to decipher all its contents, but only succeeded in achieving his death and the dissatisfaction of not deciphering a single word. His mysterious death, preceded by paranormal phenomena and constant visions, helped the book acquire an even more cursed and fatalistic tone, provoking terror in many and in others the need to obtain it at any price.
To this day its origin is still debated along with its purpose and original owner. Some believe that whoever masters the forbidden knowledge of its pages will receive the gift of immortality and absolute knowledge of the laws of the universe, an incredible power that will come at a terrible cost. Others see it as an approach to the past and to lost knowledge that could even today be the solution to many modern problems.
Perhaps the greatest mystery is its virtual impossibility of translation, as well as the constant disappearances and appearances of both the original and its copies. Others prefer and claim that it is better to destroy it, as it may be too dangerous for its contents to be revealed.
Undoubtedly, both books are impressive and impressive for all the mystery and terror they hold. Perhaps the Lemegeton is the most dangerous so far for its precision and detail in the descriptions of demonic rituals of invocation and control of beings from other dimensions. But the Book of Soyga has even more mystery, a mystery more terrifying in its own lack of comprehension and how little we can size up the contents of its pages.
Of course it is impossible to determine whether these books are true or false. Perhaps for some people they will only be simple legends or the product of the imagination and magical beliefs of men of the past, but for others these books will surely hold terrible or desirable power and effectiveness, and they will see them as a mechanism for both good and evil. As subjective is the veracity and reality of their content as is our own existence or the existence of an occult world. Perhaps at some point we will be able to understand all its content and study it, but it would be impossible not to think about the limits of an ethical exploration through moral principles, asking ourselves the question: How far would we be willing to go to acquire this knowledge? These rituals, codices and knowledge can be perceived by the majority as threats to the already established order and personal security.
For now let us limit ourselves to the fascination and the idea that these books, cursed or not, exist and are there waiting for human curiosity to rediscover them hiding dangerous or powerful truths in plain sight, truths that we should view with at least a minimum of respect. Their reputation as cursed books are a reminder of the very quest for knowledge, power and wisdom that is innate to human beings, beyond their beliefs.
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Hay una película llamada Posesión infernal, nose si la viste, sino, te la recomiendo totalmente ¿Por que la menciono? Me hiciste acordar a ella por lo que describes. En ella, había un grimorio satánico, prohibido y se aplico el dicho: La curiosidad mato al gato ya que el precio a pagar por leerlo y conocer su contenido fue muy alto. Al leerte uno se pregunta ¿Qué precio uno esta dispuesto a pagar para conseguir lo que quiere? Sea inmortalidad o lo que sea, yo creo, no estaría dispuesto a pagarlo ¿Y tu?
Gracias por traernos estos dos libros interesantes. Ojala no existan pero uno nunca sabe ja ¡Saludos!
Hola, la verdad tengo dudas si he visto o no esta película, hay muchos grimorios y códices dando vuelta por internet durante un tiempo , me fascinaron. Como respondía recientemente yo prefiero no tener la opción de elegir porque soy un ser curiosamente nato y sacrificaría cualquier cosa por el simple hecho de conocer que poder obtendría. Bendecido día y felicidad.
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Esta es una excelente pregunta, quiza yo te pueda decir que no estaria dispuesta a pagar ningun precio si eso supone un peligro, pero, ¿y la tentacion? Ahora digo no, pero al tener ese poder y ese conocimiento a nuestro alcance, ¿pensariamos igual o nos dejariamos llevar por la curiosidad? 👀 El ser humano es curioso por naturaleza, hay cosas con las que no debemos jugar, pero igual lo hacemos jaja
Si existen o no esos libros no lo se, pero ruego nunca encontrar ningun tipo de libro prohibido precisamente por lo que mencione arriba 😂 el miedo no es sonzo jajaja
Sin dudas, la curiosidad es la que nos hace hacer sacrificios en espera de un resultado, la verdad yo prefiero no tener la oportunidad de elegir, porque creo que elegiría la opción de sacrificio por conocimiento o poder. Un saludo mi estimado buhito, tenga bendecido día.
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STOPSolo eché en falta, puede que me saltara alguna línea, que no contaras si alguno de los grimorios mencionados estaba escrito en piel humana, que a decir es el papel preferido por el maligno.
La verdad, solo repito algo escuchado y que pongo en duda.
Libros prohibidos hay muchos. El índice vaticano debe contener varios miles y muchos gobiernos tienen sus propias listas. Por fortuna, muchos de ellos son accesibles en Internet, donde no siempre alcanza la mano del censor.
De mi juventud, recuerdo Las Ruinas de Palmira, pero ya debe estar permitido y no creo que sea difícil de encontrar. Un caso más interesante es Los Protocolos de los Sabios de Sion, accesible en Internet.
Cuentan que cuando se imprimía, lo hacían en secreto, sin que el editor se identificara y que los ejemplares en las librerías se vendían de inmediato.
Se desconoce el autor y hay quienes lo atribuyen a la KGB u otro cuerpo de seguridad e inteligencia con fines propagandísticos difamatorios.
Ninguno trata sobre hechizos o brujerías.Excelente relato @lmadepoeta.
Buena suerte.