Days ago I was on the beach spending a different day with friends. I must admit that the sea is one of the few places where you can connect with the person who lives within you, it is a strangely satisfying experience and it fills your body with new and good energy.
What was different about this whole adventure on the beach were these small and curious creatures that peeked out of their cave and stayed like tiny statues watching us and at least movement hid like lightning. These curious but very nervous yellow crabs made us all day and I did not miss the opportunity to take photos of one of them, perhaps the one that was sharing the most with us.
Hace días estuve en la playa pasando un día diferente entre amigos. debo reconocer que el mar es de los pocos lugares donde te puedes conectar con la persona que vive dentro de ti, es una experiencia extrañamente satisfactoria y te llena el cuerpo de nueva y buena energía.
Lo diferente de toda esta aventura en la playa fueron estas pequeñas y curiosas criaturitas que se asomaban de su cueva y se quedaban como diminutas estatuas observándonos y al menos movimiento se ocultaban como un rayo. Estos curiosos pero nerviosísimos cangrejitos amarillos nos hicieron compañía durante todo el día y yo no perdí la oportunidad de tomarle fotos a uno de ellos, quizás el que mas estuvo compartiendo con nosotros.