- Si yo hablase lenguas humanas y angélicas, y no tengo amor, vengo a ser como metal que resuena, o címbalo que retiñe.
- Y si tuviese profecía, y entendiese todos los misterios y toda ciencia, y si tuviese toda la fe, de tal manera que trasladase los montes, y no tengo amor, nada soy.
- Y si repartiese todos mis bienes para dar de comer a los pobres, y si entregase mi cuerpo para ser quemado, y no tengo amor, de nada me sirve
Debemos amar a nuestro projimo como a nosotros mismos.
Gracias por compartir tu publicación, mi estimado. El tomarte un tiempo para escribir, enseñarnos y aportar de tu experiencias y conocimiento, es una demostración de amor.
Un abrazo, Dios te bendiga.
nosotros mismos no nos amamos tanto como deberiamos, debemos buscar un mejor ejemplo de amor :)