hormigas en su trajín entran y salen de la corteza del árbol,
en el mismo hábitat un ave construye su nido
y la ardilla en su faena trepa su tronco
cargando su alimento preferido,
mientras por complacencia,
el sol incándescente cumple su función natural,
y en dirección a la saeta del reloj, un vendaval
sopla las nubes con furor
precipitándose estas al atardecer.
Y así, al ritmo de la vida misma, “cada quien”
en medio de los efectos del ambiente,
en su quehacer, en su transitar…
Autoría propia.
Así es, brismar, esa es la orden: convivir con el Universo colaborando con sus leyes. Muy buen post. Upvote.
Gracias gustavoknowledge, mil gracias.