Hola a todos de nuevo, hoy quiero contarles una pequeña historia sobre mi adicción por algo que seguro dirán que es común en una niña, ¡asi es! mi adicción es por los peluches. Siempre me han gustado mucho los peluches, siento que cuando eres niño pueden ser amigos cuando los necesites, compañía para tardes de juegos, protección para las noches de miedo y todo lo que puedas imaginar. Particularmente, cuando estaba pequeña los adoraba, tanto que no había navidad que no le pidiera uno al “niño Jesús” o “Santa Claus” (como lo llamaran en tu niñez), no se crean, yo también pedía juguetes (ahora pienso que exageraba pidiendo tantas cosas pero en ese entonces yo decía que los duendes siempre trabajaban mucho, me tenían que hacer mis regalos también jajaja), tampoco había cumpleaños que algún familiar no me regalara alguno, era increíble. Recuerdo que mis padres me decían que “¿qué haría con tantos peluches después?” y yo les decía “amarlos por siempre”, parece una frase de Elvira ¿cierto? Jajaja. Pero les cumplí porque hasta el sol de hoy los conservo y cada uno es especial (ni yo misma me explico cómo aún recuerdo los nombres de todos). Yo no sé si pensaba que crearía “pelucheland” en mi habitación o si ellos cobraban vida en las noches y quería que cada vez tuvieran más amigos para que no se aburrieran mientras estaba dormida… hoy pase a verlos y vino una oleada de recuerdos con ellos a mi cabeza, siempre pienso que era una adicta y que estaba loca por pedir tantos peluches a lo largo de mi infancia pero luego los veo y me doy cuenta que volvería hacerlo, no me arrepiento de nada.
Ah, por cierto, el artículo se llama avalancha de peluches porque cuando los fui a ver trate de tomar uno y aun no logro entender como paso pero literalmente me cayeron encima, tal vez porque yo no soy normal y se me ocurrió tomar uno de la base de donde estaban… el punto es que fue como una explosión de peluches en mi contra, pero hay que tomar cada momento como oportunidad ¿no les parece? Así que aproveche de tomarme una foto con todos jajaja.
Saludos a todos y mil gracias por leerme, este post fue algo diferente a los anteriores pero quise intentar publicar experiencias propias que pudieran ser entretenidas para ustedes y/o que les trajeran recuerdos de algo especial porque como dicen "RECORDAR ES VIVIR". Espero les guste ¡Hasta el próximo post!
PD: Si, el del centro es Guaky, la mascota de la Copa América 2007 en Venezuela.
RECOGER NO FUE DIVERTIDO, OYERON...
Sencillez convertida en hermosura. Muy gratificante.
Muchas gracias por tus lindas palabras y que bueno que te haya gustado! :D
Muy divertido este relato! Jajajaja!
muchas gracias jajajaja
jajaja se nota que te divertiste con tus peluches.
No te imaginas cuanto jajajaja
Ya se que regalarte @danielala. Besos.
jajajajaja es velda, besooos