Felices fiestas para todos, espero de todo corazón que hayan pasado una Navidad en familia, espiritual y confortable.
En el caso que no sea así, espero que la gracia de Dios os ilumine y dé la capacidad para afrontar las vicisitudes de la vida, y si no creen en Dios, pues espero que encuentren en familia, amigos o en la sabiduría popular la respuesta a sus problemas, recuerden: todo pasa.