Nada como la naturaleza es su mayor esplendor, paisajes que dejan a quienes lo visitan con ese sentimiento de paz y armonía consigo mismo y con la naturaleza. Donde se respira aire puro, donde puedes mirar en tus alrededores y contemplar lo afortunado que somos de estar vivos y poder todavía presenciar lugares como La Cascada del Vino, el cual, es un destino turístico de mi país Venezuela, en el Estado Lara, donde acuden aventureros que el encanta el clima de montaña, acampar y compartir en familia.
La Cascada del Vino, tiene una caída de agua de aproximadamente 90 metros de altura y debe su nombre al color característicos de sus aguas que en contraste con las piedras, nos muestra un color semejante al tinto, típico del vino. Este efecto, es producido por los materiales ferrosos y sustancias como la antocianina que se desprenden con el flujo constante del agua, el cual, de dar este color peculiar.