Los gritos de los niños y el transitar a menudo de los vendedores, Pero uno se alegraba al ver la gente sentada en la calle, Es una delicia recordar el aroma de las comidas de esos tiempos. Ver a los jóvenes bailar la música de esa época era todo un acontecimiento Hoy el cantar de una chicharra me despierta y viene a mi memoria aquellos días de mayo.
Poema Original
muy particular de sus tardes.
hacían que las siestas fueran muy cortas.
risueña,
contemplando los mangos caer de los árboles
y respirar la tierra húmeda del aguacero de la mañana.
Era una competencia culinaria entre las abuelas del barrio.
(no olvido el pata-pata de Miriam Makeba y maletica verde de George Baker).
Sort: Trending