Nunca me había dado cuenta de la semejanza
Que tiene la vagina con el ojo
Y mas se si le ve de forma vertical
Parece el clítoris un pequeño iris
Por donde no se ve sino se siente
La vagina orificio y boca desdentada
Que me acompaña siempre
Tiene carácter de ojo
Un carácter tan apócrifo
Se podría decir
que esta muerta
y revive
por pequeños instantes
La vagina
que es de mujer
porque no puede ser de hombre
tiene distintas personalidades
Y a veces le da
Por enfermarse
Por secarse
Por agrietarse
Por salirle hongos
Que a lo mejor son alucinógenos
Y le permiten volar
La vagina le da por valorar los
mecanismos infinitos del dedo
y también por ser la sucursal
de la lengua
cuando se siente llena de vitalidad
y de tanto lamer
se pone roja
como el rojo de los labios finos de un esquimal
combinados con la bemba de una mulata
mi vagina tan húmeda como siempre
me habla y me dice cosas
que no entiendo
pero estoy segura que debería entender
los pelos encrespados
le hacen cosquillas a los labios
sofocados de calor
que rozan el encaje negro
la vagina
harta de su tan convencida
función maternal
a veces le da por rebelarse
y se abren las piernas
se cierran los ojos
se muerden los labios
y no se siente nada
tan solo ese húmedo
pragmatismo
del no.
Iris Negro - Georgia O-Keeffe
Me gustó muchísimo tu poema, me sentí un poco liberada.
hola, que bonito, eso es un poco lo que buscaba, voy a estar posteando mas poemas de ese tipo pronto!
Interesante Pamela. Pasate por mi perfil, un gusto leerte
oh muchas gracias, voy a estar posteando muchos mas poemas, esta pendiente, me pasare por tu perfil!