SIEMBRA EN TU CAMINO AMOR Y CARIÑO
Y TEN POR SEGURO QUE LAS PERSONAS
TE DEVOLVERÁN LO MISMO.
Esta reflexión es lo que yo llamo una ley de vida: quien da recibe. A lo mejor no por igual, porque todas las personas no tienen la misma generosidad ni la misma capacidad de agradecimiento.
Lo más hermoso es cuando se da sin esperar nada a cambio, porque siempre hay un Ser Superior que te está observando y que tendrá en cuenta tus obras para darte a ti en abundancia.
Por eso a tu familia, a tus amigos, incluso a los extraños, dale amor y ayuda cuando la necesiten, y no hablo de ayuda material, aunque si puedes hazlo también. A veces, para ayudar a alguien, unas palabras oportunas, un buen abrazo o una sonrisa son suficientes.
Autor: Tucídides López @verseador