"Tus latidos llegan a mí como voces que me invitan a tocarte, concurren muchos obstáculos, a veces desisto, a veces lo intento, sé que es inmenso lo que siento, sé lo diminuto que sientes, no esperaré nada a cambio, excepto desearte una eterna felicidad, mientras yo intentaré escuchar otros latidos, hasta que encuentre el mío, donde pueda levantar un sólido pedestal que soporte el amor"
"Tus latidos llegan a mí como voces que me invitan a tocarte, concurren muchos obstáculos, a veces desisto, a veces lo intento, sé que es inmenso lo que siento, sé lo diminuto que sientes, no esperaré nada a cambio, excepto desearte una eterna felicidad, mientras yo intentaré escuchar otros latidos, hasta que encuentre el mío, donde pueda levantar un sólido pedestal que soporte el amor"
Foto: Robert Cedeño.
"Escúchala, escúchame…
Sigo aquí de pie, en cada latido y respiro…
Te fuiste y estas mejor, convencido estoy que tu sonrisa jamás se borrara en el universo, pues las estrellas te obsequiaron su polvo y hoy vuelves a ellas…
Cuando mi turno llegue recíbeme y aparta de mi la soledad"
Sigo aquí de pie, en cada latido y respiro…
Te fuiste y estas mejor, convencido estoy que tu sonrisa jamás se borrara en el universo, pues las estrellas te obsequiaron su polvo y hoy vuelves a ellas…
Cuando mi turno llegue recíbeme y aparta de mi la soledad"
Letra y música: Ignacio Izcaray.
interprete:
Cecilia Todd.
Fabiola José: Voz
Luisana Pérez: Voz
Javier Marín: Bajo
Rolando Canónico: Percusión
Pedro Marín: Mandolina