La ironía de la democracia y la independencia gringa

in #politics7 years ago

Ayer que fue el día de independencia gringo, no pude evitar pensar en la validez de dicha celebración. Cuando se trata de celebrar la independencia de Guatemala, por ejemplo, yo soy siempre muy pesado con el tema ya que se trata de una independencia que benefició a criollos y herederos de los colonizadores en general. Incluso me parece ofensiva tal celebración. Pero ignoremos mi sensiblería pro-justicia social para continuar con el tema principal. La independencia gringa es mas o menos diferente ya que allí, no se tiene una presencia indígena al mismo nivel de Guatemala, su acta de independencia no es un copy paste, como lo fue acá del acta mexicana, sus personajes fundadores fueron bastante razonables y admirados por muchos hasta hoy en día, además que han cedido estados enteros a las comunidades aborígenes. Así que esos componentes racista-colonial y de criollos tontos que yo veo en la independencia de Guatemala que me molestan tanto, es diferente en la independencia gringa. Esta última sí benefició a la mayoría de la población.

Con esto no digo que no hayan aún rasgos del racismo colonial gringo, basta ver sus recientes problemas con los tubos de petróleo que quieren poner por la fuerza saqueando tierras de indígenas gringos. O tampoco quiero decir que su independencia no fue un acto violento y que beneficiaría más a una minoría. Sin embargo sí es menos inaceptable que la independencia guatemalteca (o las independencias de muchos países latinoamericanos). Lo que tampoco signifique que yo la celebre.

En general eso del patriotismo colonial a mi no me parece y menos aún celebrar patrias ajenas. Todo esto me recordó un libro que encontré hace ya bastante tiempo, entre mis andanzas por la internet: The irony of democracy, o La ironía de la democracia. En este libro se narra la independencia gringa como un proceso elitista, no humanista y menos democrático.

Según este libro el poder es la participación en las decisiones que dan forma a nuestro modo de vida, y la toma de decisiones sobre quién recibe qué, cuándo y cómo. El poder existe desde que existen objetos externos al humano, que pueden otorgársele o quitársele y también desde que unos deciden deliberadamente sobre la [forma de] vida de otros. La democracia liberal que se pretende en los EEUU es expuesto como un sistema puramente de poder, de elitismo, un acto compuesto básicamente de dos cosas: abusivez (al decidir unos sobre las vidas de otros a veces sin su consenso) y posesividad (no sólo la defensa de la propiedad privada si no la apropiación por la fuerza de cosas ajenas a la élite).

De modo que todo poderoso ha de ser un abusivo, que se auto-licencia para administrar cosas y que decide sobre las vidas de una masa de impotentes. Es una dicotomía, una separación ideológica de personas, no en razas, no con base en el dinero o las creencias o la sexualidad si no con base en si tienen o no tienen poder. De eso se trata el elitismo. Donde la élite es el sector social de los poderosos.

Sea correcto o no, sea moral o no, sea adecuado, relevante, estúpido, injusto, o no, cosa que decide cada quien: el elitismo es una realidad que viene existiendo desde hace muchísimo.

Este libro es básicamente un tratado histórico de la política gringa y la ironía reside en que ese país practica el elitismo, no la democracia. Que tengan cierta estabilidad social y bastantes esfuerzos pro-derechos humanos y pro-justicia social es un efecto de tal elitismo y es gracias a que entre sus élites tienen a humanistas y pensadores de grandes tallas morales. Pero en la práctica, sigue siendo un asunto puramente del ejercicio del poder de unos pocos, no del poder del pueblo (demos+kratos). Lo que arroja una pregunta ¿Qué tan relevante y qué tan funcional es la democracia? Es este un libro extenso e interesante, acerca del elitismo y la democracia. Dos asuntos que parecen antagónicos, pero que deben convivir, si se quiere avanzar como humanidad a sistemas más avanzados y justos.

Les dejo con un párrafo que me pareció muy bueno:

A stable elite system depends on the ‘‘circulation of elites’’—the movement of talented and ambitious individuals from the lower strata into the elite. An open elite system that provides for ‘‘a slow and continuous modification of the ruling classes’’ is essential for continuing the system and avoiding revolution. Popular elections, party competition, and other democratic institutions in the United States have not enabled the masses to govern, but these institutions have helped keep the elite system an open one. They have assisted in the circulation of elites, even if they have never been a means of challenging the dominant elite consensus.

Traducción:

Un sistema elitista estable depende de la "circulación de élites" - el movimiento de individuos talentosos y ambiciosos desde los estratos bajos hasta la élite. Un sistema elitista abierto que permite la modificación lenta y continua de las clases dominantes es esencial para la continuidad del sistema y evitar así cualquier revolución. Las elecciones populares, la competencia de partidos políticos y otras instituciones democráticas en los E.U. no han permitido que las masas gobiernen, sino que han ayudado a mantener el sistema elitista en un modo abierto. Las masas han ayudado a esta circulación de élites, aún cuando no han tenido los medios para retar el consenso de la élite dominante.

Luego menciona que los cambios en la política y la estructura del gobierno gringo ha cambiado por pasos pequeños y no por medio de revoluciones. Así que la independencia no fue algo revolucionario. Nunca lo es. Siempre es un asunto de negociaciones y procesos de poder.