la Despedida de Nuestro Señor Jesucristo. || the Farewell of Our Lord Jesus Christ.

One of the last words of the Lord Jesus Christ before going to the cross was a prayer for his disciples, including us there as well.

But I do not pray only for these, but also for those who will believe in me through their word, so that they may all be one; as you, O Father, are in me, and I in you, may they also be one in us; so that the world may believe that you sent me.

John 17:20-21

The Lord, after such an act of humility, after washing the feet of his disciples, after ordering them to go throughout the world and preach, to replicate the love and kindness of the teacher, also shared with them more than Therefore, he taught them how to carry out this task by showing them the difficulties they would be facing.

The disciples would learn and understand a new meaning about the kingdom of God since the time was near when they should walk and have their own experiences, that the Lord would leave them but they would NOT be alone, the Lord promised them that the Holy Spirit would always be with them, The Lord NEVER told them that they would NOT have problems but He did teach them that no difficulty would be too much since Jesus conquered the world.

Now let's use our imagination and imagine that we are sitting at the table with Jesus Christ, that he himself is breaking the bread and pouring the wine while he speaks to us from the depths of his heart, knowing absolutely everything that will happen in some hours. After this, this last prayer begins for us who are next to him, opening his heart for us. Can you imagine it?

Jesus' last prayer, just before dying on the cross and his heart's desire was for us to remain united in his love and in this way the world would know Jesus through us, that has been his prayer in that moment and his desire until now, we must keep this in mind as one of the most important desires of our Lord Jesus Christ.

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Una de las últimas palabras del Señor Jesucristo antes de ir a la cruz ha sido una oración por sus discípulos, allí también estamos nosotros incluidos.

Mas no ruego solamente por estos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos, para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste.

Juan 17:20-21

El señor después de semejante acto de humildad, después de lavar los pies de sus discípulos, luego del encargo a que vayan por todo el mundo y prediquen, que repliquen el amor y bondad del maestro, también les compartió mas que eso, les enseñó como llevar adelante esta tarea mostrándole las dificultades que estarían enfrentando.

Los discípulos aprenderían y entenderían un nuevo significado acerca del reino de Dios ya que estaba cerca el momento en que ellos deberían caminar y tener sus propias experiencias, que el Señor les dejaría pero ellos NO estarían solos, el Señor les prometió que el Espíritu Santo estaría con ellos siempre, El Señor NUNCA les dijo que NO tendrían problemas pero si les enseñó que ninguna dificultad sería demasiado ya que Jesús venció el mundo.

Ahora nosotros hagamos uso de nuestra imaginación e imaginemos que estamos sentados en la mesa con Jesucrito, que él mismo está partiendo el pan y sirviendo el vino mientras nos habla desde lo profundo de su corazón sabiendo absolutamente todo lo que secederá en unas horas. Después de esto comienza esta última oración por nosotros que estamos junto a él abriendo su corazón para nosotros, ¿Logras imaginarlo?.

La última oración de Jesús, justo antes de morir en la cruz y el deseo de su corazón fue que nosotros permaneciésemos unidos en su amor y de esta manera el mundo conocería a Jesús mediante nosotros, esa ha sido su oración en ese momento y su deseo hasta ahora, debemos tener esto presente como uno de los deseos mas importantes de nuestro Señor Jesucristo.

Muchas Gracias por compartir esta lectura, deseo que el Espíritu Santo de Dios traiga revelación de su palabra a nuestras vidas.