El bar esta medio lleno, con música de ambiente, olor a pino recién cortado y frió de invierno. Espero atentamente por la llegada de un joven que conocí a través de una pagina de citas.
En medio del mejor cóctel, me distrae la sonrisa de una chica con cabellos dorados, piel blanca como la nieve y con un pequeño hoyuelo en la mejilla izquierda; quien recién entra al local.
Se acerca y como si de conocerme, expresa con tono irónico que hacen falta algunas mujeres en el bar. Somos las únicas en el lugar por lo que su comentario me resulta gracioso; a partir de ahí comenzamos a hablar un poco. Necesitaba matar el tiempo y la situación cayo de perlas.
Luego de unos minutos, ella, mostrando su teléfono, comenta que quedo sin batería a poco de llamar a una amiga para verse. Arrojando sobre mi una mirada picara mientras muerde su labio inferior y sonríe. El gesto se me hace inusual pero levemente atractivo.
Me invita otro cóctel mientras observo el reloj, van diez minutos pasada la hora del encuentro. Sin darle importancia continuo conversando, llegando al punto de notar que ambas guardamos gustos similares y de a poco nos hacemos mas cercanas.
Posando sus manos sobre las mías ella confiesa que nunca antes había tenido esta especie de conexión con otra persona. Me observa los labios y se acerca suavemente mientras me toma del cuello marcándome con un beso.
Estoy confundida pero excitada. El alcohol y sus labios forman una combinación que despliega calor sobre mi cuerpo, perfecto para la época. Expectante la miro mientras aleja su rostro del mio.
Ella desprende sensualidad y atrevido, aun mas cuando luego del beso, en su boca se forma una curva que termina en su hoyuelo izquierdo. Me le quedo viendo hasta que abre los ojos, mientras se relame los labios y pregunta:
- ¿Nos vamos?
Asiento inconscientemente la cabeza y como si me hubiese leido el pensamiento, me toma del brazo y me lleva a la salida del bar, con los ojos sorprendidos/pasmados del mesero siguiendo nuestro repentino escape. A pocas cuadras despues nos encontramos en su depertamento.
Me invade la duda y la curiosidad por lo que pueda pasar y ademas es imposible no sentirme excitada por lo que sucede. Partiendo mis pensamientos, ella llega otra vez, abrazandome por la espalda y dandole un leve mordisco a mi oreja, mientras susurra lo mucho que le gustaria tomar una baño caliente conmigo.
Metidas en la bañera se acerca nuevamente y me roba un largo beso que me calienta aun mas, animandome a corresponderle. Comienza de a poco un juego de tacto y burbujas que no termina hasta muy llegada la noche.
Jamas me habia sentido tan complacida por alguien. Lo que despierta un lado jugueton en mi que parece gustarnos a ambas. Ya secas y en la cama aprovecho para darle un mordisco a su labio inferior y jugar con sus dedos con la esperanza de que me entregue mas placer del que ya me dio.
Empieza pronto otro juego de tacto, esta vez, entre las sabanas.
Pueden ir directo a la imagen original dando click en las del post