Saludos familia de steemit, una de mis pasiones desde niño ha sido escribir historias, cosa que he ido mejorando con el paso del tiempo y el género de terror es uno de mis favoritos por su versatilidad y la capacidad que tiene de generar emociones de angustia e incertidumbre al lector, hoy quiero contarles una historia muy real que ocurrió hace bastante tiempo cuando mi tío José M. vivía en san juan de los morros edo. Guárico, y aunque yo nunca he tenido experiencias parecidas intentare narrarles la historia con un toque muy personal.
Esta crónica es de mi autoría basada en los hechos vividos por mi tío y su familia.
Tío si estás leyendo esto espero que te guste mi versión.
La historia comienza en una almacenadora del estado Guárico esta contaba con almenos una decena de galpones todos en forma organizada para mantener un control y mayor vigilancia, en la entrada se encontraba la cabina de seguridad y mantenimiento, lugar que sería el trabajo de mi tío durante los siguientes 3 meses (o eso estimaba el).
En esa época se encontraba desempleado y un amigo le ofreció el trabajo alegando que era muy tranquilo por las noches, que el lugar estaba rodeado de altos muros y que si de casualidad alguien entraba a robar se escondiera en la cabina, no saliera y se quedara encerrado allí hasta que asomara el sol.
Mi tío que nunca había trabajado de vigilante acepto el empleo ya que la paga era buena y según su amigo el esfuerzo era poco. La primera semana le enseñaron el lugar y acciones a tomar en caso de una eventualidad, su turno seria solo de noche y tendría un compañero que por avanzada edad y tiempo en la empresa siempre se quedaba en la garita de la entrada y a él le tocaba vigilar (de vez en cuando) las afueras de los galpones.
La mayoría del almacenamiento era maquinarias y materiales de construcción, ensambles de hierro y algunos pocos alquilados por el estado, pero existía uno que no tenía uso desde hace años y que por órdenes del dueño no estaba disponible a nadie, Este era llamado Galpón 9 debido a su enumeración. Lo que más le llamo la atención fue que dicho galpón se encontraba casi vacío exceptuando algunos muebles de hogar, pero mi tío José no le dio mayor importancia a lo que había visto y se olvidó del asunto.
Como al cuarto o quinto día en una de sus aburridas rondas escucho un estruendo en el noveno galpón vacío del que les hable, un sonido que describe como una gran base de hierro chocando contra el suelo o algo así, prevenido por la advertencia de un robo lo primero que hizo fue correr a la cabina principal sin quitar la mirada a la entrada del almacén.
Al contarle la historia al viejo (así llamaba a su compañero) este le dijo que se calmara esperaran al amanecer para revisar que había pasado allá, obviamente mi tío no pudo conciliar el sueño en toda la noche. Al otro día para su asombro el galpón estaba intacto, ni puertas ni ventanas estaban forzadas, sorprendido y recordando aquel semejante estruendo reviso todo el almacén a detalle tanto así que percato que algunas zonas no estaban tan sucias como el resto e incluso el piso estaba húmedo, y el ambiente impregnaba un hedor muy fuerte que asemeja al de animales muertos.
A partir de ese día trabajar allí no sería igual, por las noches se sentía observado, sentía un aura muy negativa al caminar cerca del galpón 9 según me cuenta, esta paranoia se incrementó la noche en que durmiendo en la garita de seguridad, tuvo una pesadilla aterradora. Se encontraba en su casa, el describe el sueño como muy realista y en principio normal, podía ver a su esposa en la sala de su casa y a él sin saber porque caminando a la habitación de su hijo, al abrir la puerta lo vio de frente, un rostro pálido y áspero, una cara ajena en el cuerpo de su hijo, rígida, sin emoción alguna exceptuando una enorme sonrisa y grandes ojo que lo seguían fijamente. Por más que intentaba zafarse del sueño no podía, su lucha por alejarse del lugar era en vano, todo su alrededor se distorsionaba excepto aquel ser que en su inmovilidad transmitía un sentimiento de odio como si fuera a hacerle algo malo, inevitablemente en busca de respuestas mi tío relaciona esa desfigurada cara al galpón 9 y la presencia que lo observaba; Entonces fue ahí, cuando menos lo creyó posible, se despertó con la respiración acelerada y el corazón a mil.
Lo que vio esa noche lo conto a todos, a sus compañeros, familia y esposa pero a nadie le alteraba tanto como a él, tuvo los siguientes 4 días asistiendo al trabajo pero evitando el caminar solo por las instalaciones, dormía como dos horas salteada mente, perdió el apetito y su cansancio físicamente ya era evidente, por consejo de su esposa y el bien de su salud abandono el trabajo, decisión de sorprendió a sus amigos. Pero lo que vio mi tío aquella noche, lo que sintió, la angustia y agonía que vivió durante esos escasos segundos solo el la conoce, dice que sería imposible explicar con palabras. Y por la seriedad con la que lo narra estoy convencido de que es cierto.
Y ustedes, alguna vez se han sentido amenazados u observados en un lugar?
O peor aún, puedes imaginar cómo sería? que de noche en tus sueños voltearas a la esquina de tu habitación y ahí estuviera él, parado, inmóvil, con esa aterradora sonrisa…Así que espero que tú, que estás leyendo esto, puedas imaginarlo y llevártelo contigo…
Buenas Noches...
Buen relato, te traslada a la sensacion de angustia de tu tio.
muchas gracias esa era la idea
De que vuelan vuelan como dicen por ahi, saludos amigo y muchos éxitos, la narración estuvo muy buena!!!
Steemians Productivos
Oye tremendo relato! Me gustó. . Te llena de intriga y pánico y mas pq yo soy de guarico y siempre tienen historias asi
me gusto mucho este relato
Muy buen post hermano, gran relato, exitos para ti...
Me gusto mucho tu relato, continua escribiendo esas interesantes historias
Que miedo me d tu relato muy bueno. Saludos
Steemians Productivos