Existe un límite entre ver el lado bueno de las cosas y conformarnos con lo malo, lástima que esa línea es bastante delgada y muchas veces la traspasamos.
Me parece que sí. Definitivamente las colas se han vuelto el momento en que muchos venezolanos pueden "distraerse" de sus problemas u ocupaciones porque a pesar de que el hacer cola es una de nuestros -aunque no queramos- deberes, quizá para muchos es el único tiempo que tenemos de socializar y ver de primera mano que no somos los únicos que pasamos por situaciones difíciles.
Tal vez el hacer colas y compartir nuestras penurias con el que esta atrás o delante en la cola es nuestra manera de darnos consuelo. Sin embargo, quiero recalcar que no es a esto a lo que nos debemos acostumbrar, no es esto con lo que debemos vivir por el resto de nuestras vidas ni mucho menos es con lo que debemos aspirar a que vivan nuestros hijos. Para mi es sumamente importante que el venezolano entienda que lo que estamos viviendo no es normal y que por ningún motivo hay que acostumbrarnos a ello.
Esta bien que veamos el lado bueno de lo que está pasando pero no caer en el error de hablar de ello como si fuera algo bueno porque no lo es.
Trabajemos mas bien en reconstruir y mejorar nuestra calidad de vida. No nos quedemos sumisos ante la grave situación y aportemos esperanza y valor a quienes les hacefalta.