En estos tiempos de crisis que se viven en la mayor parte de Latinoamérica, es difícil no caer en deudas vencidas de servicios básicos, y es que precisamente ese fue el caso que me acabó de pasar. Esta semana me cortaron el servicio de telefonía y el servicio de internet, para variar la quincena (el sueldo) no llegó el día 15 si no recién hasta hoy 17 de agosto cuando por fin pude pagar.
En mi travesía sin internet, donde no me quedaba de otra que dormir temprano, leer, y matar el tiempo de laguna u otra manera. Intenté robarle WI-FI al vecino pero para mi buena o mala suerte el también estaba cortado. Pero no me rendí, intente buscar redes cercanas para intentar conseguir la clave y fue ahí cuando encontré una contraseña de unos de mis vecinos de la parte trasera de mi casa. La señal llegaba bien baja, tenía que salir al patio para conectarme. Nunca pasé tanto tiempo en el patio.
Ahora estoy pensando en reorganizarme para que no me vuelva a suceder esto. Tratando de ordenar los pagos por prioridad y haciendo un esfuerzo por abstenerme de cosas innecesarias.
La crisis nos agobia, pero no nos rendiremos jamás.
Ánimo a todos, no hay tormenta que dure cien años.
has valorado compartir el costo de tu conexión con tus vecinos y pagar todos menos? podéis montar servicios de voz ip, mensajería, cam, chat vecinal, carpetas compartidas, etc e incluso un QoS para que no abuse nadie.
No me había puesto a pensar en eso, es una buena idea porque ahorrariamos todos en realidad. Gracias por tu comentario.
Hay que pelear para salir para adelante.