Era se una vez en algún lugar del trópico de América vivia un ave Bobo a esta le gustaba mucho imitar a otras aves, solia posarse en los acantilados maravillado e imitando a las aves que volaban cerca de el. Tenia a dos especies de Ave a quien admira muchisimo estas eran el Albatros y el Petrel.
Por un lado el albatros se erigia como un soberano de los cielos con su gran tamaño, dejando a la gran mayoria intimidados, y por otro lado, estaba el Petrel quien de forma muy agil y majetuosa recorria a gran velocidad muy cerca de las aguas del mar para tomar a su presa con un ¡ZAS!
El en cambio, ¿que era el? un simple pajaro Bobo que no gustaba de si mismo, ni de sus torpes y a su juicio nada utiles patas de pato que lo hacian caminar como un verdadero zangano, no queria ser como las de su especia, es por ello, que cada vez que trataba de estirar muy grandes sus alas como el Albatros para verse imponente o de imitar el vuelo super bajo al agua del Petrel sus compañeras no podian evitar reirse del comportamiento de el ave Bobo.
¿De que se ríen ustedes? -Les reclamaba. De nada, de nada. -le respondian sus compañeras- es solo que no entendemos, ¿por qué intentas ser algo que no eres?
¡Callense! Ustedes pueden estar conformes asi como son de mediocres pero yo no quiero quedarme asi, yo quiero ser algo más, quiero poder ser diferente al resto. ¿Es acaso malo querer definir quien quiero ser?- dijo-
Es que tu eres un Ave Bobo compañera. No le des mas vuelta al asunto. - Le respondieron sus compañeras.
¡Se acabo! ¡NO ME VUELVAN A HABLAR! No quiero más su mala vibra. Les respondió el Ave Bobo
Fue asi como se fue imitar el vuelo de las aves que tanto admiraba, volando muy cerca de la superficie del agua al mismo tiempo que extendia las alas tanto como podia, su vuelo fue un algo torpe y para nada majestuoso y en un instante ¡PLAASS! Un gran tiburón emergió del agua y se comió de un solo bocado al Ave Bobo.
FIN