Tras un rato se dejo caer en una especie de miradores o espacios de madera para sentarse o tumbarse. Allí repaso sus decisiones, sus actos y movimientos. Pese a ser una persona bien formada, lo tenia todo en contra, joven y sin experiencia, casi tenia un pósit en la frente que decía ‘inútil’.Quería trabajar, lo necesitaba, para ayudar en una mala racha en casa, pero por más que lo intentaba, nada. Iba a muchas entrevistas, pero si te e visto, quien sabe si me acuerdo de ti. Esa desazón de no ser realmente valorado, le hacia sentirse inútil. Un yunque, prácticamente, le impedía levantarse todas las mañanas, pero lo hacia, por su familia.
Una explicación, una ayuda, un motivo, no estarían de más, pero para los recursos humanos, solo eres un nombre, del cual nada más importa, pensaba tumbado sobre unas laminas de maderas grisáceas por el salitre y el Sol, mientras miraba la inmensidad de la oscura noche. Mientras una lagrima le recorría la mejilla.
Pensaba en echar a andar para siempre, no volver y dejar de ser una carga, una molestia. Quizá, una opción no tan descabellada, ya que aliviaría los problemas de la única manera que podía, siendo para siempre un despojo, lejos de los suyos y dejando que vivieran sus vidas, sin ser una molestia.
Anduvo de nuevo, dejando atrás las maderas grises, la noche oscura y abrió de nuevo la puerta de su casa.
excelente aporte amigo saludos, espero contar con tus votos