En 1985, el emprendedor MAC ANDERSON amaba las frases motivacionales. Las amaba tanto que decidió poner una empresa que vendiera mercancia con ella: Succesories.
Anderson vendía tazas, playeras, libros...pero lo que terminó invadiendo las paredes de las oficinas del mundo fueros sus PÓSTERES.
Los carteles motivacionales se convirtieron en un negocio motivacional. Para 1996, SUCCESORIES tenia 51 tiendas y facturaba $56,000,000 dolares anuales.
Pero a inicios del siglo XXI, la gente tuvo menos razones para ser "OPTIMISTA", llego el Internet...
....Y el póster motivacional terminó convirtiéndose en un simple MEME.