Una experiencia gratificante y de reflexión

En el 2015 tuve la oportunidad de realizar una investigación acerca de uno de los grupos étnico del Estado Zulia - Venezuela por medio de una cátedra opcional en la universidad, la misma llevaba el nombre de “comunidades indígenas” aunque la investigación solo pudo hacerse a nivel de revisión de documentos debido a falta de presupuesto y tiempo para realizar dicha investigación, debido a que fue un semestre difícil entre problemas administrativos y del profesorado; se pudo recabar información importante sobre el grupo étnico a pesar de las adversidades.

El profesor de la cátedra propuso para finalización de semestre un conversatorio para dar a conocer todo lo investigado de los grupos étnicos que se encuentran en el Estado este fue llamado “APÜSHII” que significa parientes/ familiares en el lenguaje Wayúu.

Este conversatorio fue presentado en el auditorio de la facultad, donde asistieron profesores, estudiantes e invitados externos. En el mismo se pudo dar a conocer a la comunidad asistida que existen cinco grupos étnicos en el Estado estos se llaman Añu, Bari, Japreria, Yukpa y Wayúu siendo este último el grupo étnico más grande representando cerca del 11 % de la población del Estado. (Según el Instituto Nacional de Estadística en 2011)

Cabe resaltar que estos grupos étnicos ya no solo habitan en las afueras de la ciudad si no dentro de la ciudad, por lo que muchas veces la población no indígena tienden a ser despectivos sobre estas personas que poseen una cultura o rasgos diferentes a los nuestro cuando se topan con ellos en el supermercado, el banco, en los espacios estudiantiles, en el bus o cualquier otro sitio.

Como trabajadora social tengo propósitos como promover la solución de problemas en las relaciones humanas y el fortalecimiento de las personas para incrementar bienestar. Y este fue el objetivo principal del conversatorio además de conocer parte de su cultura, tradiciones, métodos de crianza y algunos otros datos.

El poder compartir los conocimientos obtenidos e intercambiar ideas y/o experiencias en ese conversatorio fue gratificante y fortalecedor en cuanto a crecimiento personal y profesional. Ser la Voz de aquellos que desconocemos, de aquellos que son discriminados y con los cuales probablemente compartimos día a día… Eso es realmente enorgullecedor para mí. Son parte de nuestras raíces, de nuestra historia y debemos respetarle como a cualquier persona sean o no de nuestra misma cultura.

En el proceso de investigación tuve el placer de conocer a Francisco Inciarte Licenciado en Antropología quien compartió sus vivencias y conocimiento acerca del grupo étnico Japreria. Quien comento que este grupo étnico solo contaba con un hablante de su lengua. Si, lastimosamente han perdido el sentido de pertenencia hacia su propia lengua así como también han cambiado su forma tradicional de vestir todo esto debido a la transculturización.

Al culminar la investigación se concluyó en que la estructura familiar Japreria es básicamente nuclear (mamá, papá e hijos), las decisiones del núcleo familiar son tomadas en conjunto por los padres, no hay evidencia del predominio de uno de los dos, de hecho cuando se produce la separación de la pareja y aún hay niños pequeños los padres se turnan para atender a sus hijos, durante un periodo están con la madre y en otro con el padre. Por lo tanto rige un principio Bilateral.

Cuando una Japreria daba a luz el cordón umbilical junto a la placenta era envuelto en hojas y colgado en lo alto de un árbol, jamás enterrada o botada. Esta labor era cumplida por el padre de la criatura. Actualmente son atendidas en los centros hospitalarios.

Entre los ritos de la comunidad Japreria se encuentran los referidos al ámbito funerario, al momento del sepelio solo deben cargar el ataúd las personas más allegadas al difunto y cuando entre las personas allegadas hay niños; y éstos transportan el ataúd hasta el cementerio, los mismos deben pasar por un proceso de limpieza que realizan los padres con preparados con diversas hierbas con el propósito de evitar que el espíritu del difunto quede en el cuerpo de los vivos.

Y no podía dejar de publicar esta foto tomada luego de una gran jornada académica exitosa, donde disfrutaba de una deliciosa arepa rellena con carne mechada, queso y salsas. Porque como les comente anteriormente, adoro la comida.

Gracias por leerme, espero haya sido de su agrado la información compartida, aprendamos a ser más tolerantes y seamos más humano. ¡Feliz Noche!

NOTA: Las fotos fueron tomadas de un samsung gt duos s7582.