Cerrar el año incluye, a esta altura del partido, además de la típica proyección de objetivos para el año venidero y del calor de diciembre, ponerme a escribir en mi diario los eventos que marcaron y vienen marcando la tendencia en toda esta loca ciudad; una suerte de apartado especial pero para la ciudad.
Empiezo: el material sigue saliendo fresco. La ciudad adquiere cada vez más habilidades y se está notando, su estilo cambia, nuevas propuestas se van descubriendo y cada vez más se adapta y destaca en el mundo que veía desde lejos, o sea, el mundo que veía en simples blogs de internet o en algún que otro artículo de diario. Un mundo que pronosticaba la sencillez de la vida por medio del smartphone y la restauración de la vida económica alegre y a consciencia; y que ahora, luego de sus largas siestas, el panorama, los barrios, las calles y la gente empiezan a transformar otra ciudad.
Córdoba tenía un par de baches y algún que otro problemita de vagancia y de malgasto de recursos, pero ahora es que con tanto cambio y nueva mentalidad es que puedo decir que la ciudad está despegando como ninguna otra en esta parte del cono latinoamericano.
Ya van 4 años desde que empecé aquel proyecto de automatizar el proceso de producción de un simple choripán completo con ensalada y salsa criolla para el público cordobés a causa de la turtuosa obligación académica que permite cerrar el ciclo del estudio universitario, para luego transformar toda esa destreza de nerd que tuve que usar en aquel momento en un puestito atendido por, básicamente, un robot, un simple personaje de ficción electrónica compuesto por instrucciones dadas de antemano para un simple fin: morfarse un perfecto choripan (y barato). En su momento fue una entretenida manera de emplear tantos saberes y de rescatar medios económicos para vivir; pero solo desde ahí -el año del puesto robot de choripanes-, por más trucho que se lea, es que fue posible considerar los años venideros como el punto de partida para la cantidad de sucesos que se expresaron y adoptaron dentro del ciudad y el país en estos meses. Y sin olvidar los muchos más que todavía estan por soprendernos.
Bueno, sí, tampoco todo marcha como comiendo bichitos; la semana pasada por ejemplo, vi cómo casi el bondi chocaba a una vieja en Gral Paz; las cosas necesitan un poquitín de ajuste, ni hablar, pero si te ponés a pensar si encontrabas estos nuevos medios de tranporte hace 4 años entrando a Malvinas Argentina o Argüello te consideraban una persona amiga del riesgo. En fin, como dije, el bondi no chocó la vieja, apenas le rozó el brazó en el semáforo (o por lo menos eso dijo ella), el sistema de automatización de manejo del colectivo quedó un poco a la deriva y se mandó un movimiento raro, nada grave; la programadora apareció enseguida con su motito eléctrica en la escena para ponerlo de vuelta en marcha dado que el bondi apaga el sistema si salta alguna de estas emergencias y llama a otra unidad para que busque a los pasajeros varados; inclusive una cantidad de gente se situó a los costados del “accidente” para buscar el responsable como si de la vieja escuela se estuviera tratando. Pero igual, a destacar no está el hecho de la falla, todo lo contrario, si no más bien su muy precipitada inserción a la sociedad que se dio en esta temporada: la mayoría de los ramales ya están cubiertos por estos bondis sin chofer, que incluso pueden intercambiar continuamente datos para ir administrando y mejorando los recorridos en la marcha y en todos los días. Quiero creer que incluso la mejor parte de todo ese embroyo no pasa solo por el hecho de haber mejorado y saneado casi todo el problema de tráfico que tenía la ciudad con estos bondis y el sistema de autos compartidos, porque lo primero que uno se imagina al enterarse de tales movidas son la cantidad de nerds y extranjeros que mueven los dólares necesarios para empezar tales proyectos; la mejor parte es que se llegó al punto en que los mismos pibes y pibas de la ciudad y del interior son los que están moviendo todas estas ideas y aparatos y proponiedo herramientas y procesos que se originan acá mismo y que no hay que salir a buscarlos a alguna revista yanqui. Y obviamente hay más de uno con el billete que sabe que a la ciudad esas ideas le quedan bien.
Quién diría que la idea proyectada en el 2017 de establecer una sucursal de la UNC en pleno barrio Argüello tendría al final las consecuencias que ahora podemos ver en la ciudad: los jóvenes de los barrios pobres de córdoba que nunca fueron contemplados por la comunidad académica ahora son la principal razón por la que la ciudad ahora estalla. O sea, las dos fintech de bancos que superan al Santander y al Bancor salieron de Arguello; las empresas que proveen las divisas electrónicas que se usan ahora en todo el mundo la armaron unos pibes de la 9 de Julio; la nueva red de edificios convertidos en granjas urbanas verticales también se idearon en Arguello; las nuevas plantas de manufactura para la construcción que solo usan impresoras 3D para sus operaciones también Arguello; y el mismo proyecto de los bondis (y en algún futuro también los taxies) se proyecto desde ahí.
Al principio era todo un show mediático-académico para algunos esto de la inserción del centro mayor de estudios en una zona totalmente alejada y desprovista de posibilidades en materia de educación de alto nivel y de los mismos niveles económicos que su típico alumnado, pero a medida que se ivan publicando los planos y los concursos y las ideas despegaban y las paredes se levantaban todos empezaron a prestar atención. De repente fueron dos años que escupieron una universidad de primer mundo dentro de un sector de la sociedad que tantas ganas tenía de despegar; y eso que muchos todavía se detractactan de aquella noticia y de saber cómo todos esos números se fueron para aquel lado del mundo y no se quedaron en estos bolsillos.
Las señales siempre fueron obvias, la única manera de encarar un gran cambio para la sociedad tenía que venir de la unión y misma disposición de saberes y recursos e ideas para todos los involucrados en este pueblo en el que vivimos. Solo era cuestión de mostrarle también a muchas personas cómo es que se hacen ciertas cosas y cómo es que saber eso puede llevar a un bien común con progreso para todos.
La educación de la ciudad. La forma en la que la reparte. Los individuos que la volvieron a aceptar.
Este año también quedará en el recuerdo, muchos quedaron de cara cuando inauguró la primera “sala” de concierto en Realidad Virtual donde estaba uno de los boliches del Abasto; era algo que se venía hablando hace un par de meses ya, pero que ahora gracias algunos de los alumnos avanzados de Artes más un par de jóvenes capitalistas se puede disfrutar la genial experiencia, aunque algo extraña, de ponerse las gafas y presenciar todo un recital de Rodrigo o Cachumba o un ballet de Salta como nunca antes se lo vio. La cuestión de todas maneras se presentó al instante, ¿Reemplazar la salida física, el disfrute del aire y la de la noche y los maravillosos humanos que le dan sabor a la fiesta, o abrazar por qué no también esta forma de representar y expresar por medio de la total abstracción? Hubo hasta algunos teatreros que se animaron a implementar tales jugarretas con obras solo disponibles con la herramienta tecnológica, haciendo una suerte de privilegio artístico para las nuevas voces y formatos que los creativos pueden usar y jugar para sus misiones.
Y por ahí se comenta también de la nueva dinámica que se le quiere dar al observatorio con un nuevo sistema de estos de Realidad Aumentada para darse un “paseo” por el sistema solar a todo lujo.
Los personajes de estas locas empresas están a full.
Las nuevas movidas igual se dieron no solo en la parte del nuevo crecimiento económico y del adoramiento a la tecnología y sus aplicaciones: no hay que olvidar que desde hace ya 16 meses el partido político de la lic. Mayor está tratando de poner por primera vez en la historia de esta ciudad una mujer gobernadora al frente, y darle así el último envión de propuestas que necesita la Córdoba; porque, obvio, 121 gobernadores masculinos en la historia de la capital, luego de mucho tabú es hora de aceptar y bajar los daños que hace el no trabajar en igualdad de generos.
La última movida loca del año me parece que fue sobre las tensiones en el tema del bosque nativo que ya arrastraban años; un episodio de este otoño, un montón de noticias desde los Gigantes. Entre medio de niveles muy peligrosos de deforestación que venían surgiendo desde hace rato, resultaron muy positivos los números sobre las nuevas etapas de reforestación que mostró una empresa de saneamiento de bosques creada para combatir esta problemática; todo pintaba que para el 2020 la porción verde del bosque de cba acabaría en la ruina mas aparece en el 2021 este loco rejunte de jóvenes agricultores con sus métodos orientales de cultivo y tratamiento de la tierra para imponer un episodio de innovación aplicado a millones de hectáreas, logrando así un nuevo resurgimiento de brotes y trastornos positivos para la biología del bosque; esto hace que se proyecte el resurgimiento de la masa verde más otras tantas iniciativas para mejorar el ecosistema en los próximos años; las inundaciones por ejemplo, que siempre estuvieron en la boca de los diarios, ahora tienen fecha de vencimiento. Muchas cabezas y voluntades aportaron la solución que se necesitaba. El movimiento llegó a los más jóvenes también, en un intento de mostrar que las nuevas generaciones siguen entendiendo el respeto que ciertos sistemas se merecen.
Y supongo que con esto asenté la mayoría de las nuevas movidas que se están dando en la ciudad para esta temporada. Se siente un poco raro de todas maneras, poner en registro personal más lo que pasa en las calles que lo que pasa en mi círculo personal; se me venían dando muchos hitos y logros, digamos, ser designada a principio de este año para la reestructuración total de la red de tranporte en bicicleta creo que incumbe a unos de mis mejores logros personales y profesionales, pero, viendo la cantidad de obstáculos que Córdoba está saltando, meparece oportuno guardar algún que otro hito de forma escrita. Porque la forma de describir esto es simplemente por medio los pequeños brotes que se observan. Pero naturalemente, siempre hay muchos escenarios para ver.
Es cierto que la cantidad de despidos de los choferes de colectivo, por ejemplo, se vio disparada hacia arriba; muchos de estos cambios también traen consecuencias negativas e inesperadas para algunos. La red de taxies de la ciudad también pretende sufrir una bajada de línea importante con estas automatizaciónes y rebajas en los usos “normales” que tenía el auto. Muchos problemas tambíen se generan con tanta innovación y cambio, y esperan solución obviamente, pues todos estos reemplazos van a necesitar de mucho ingenio para reubicar tantas ocupaciones y actividades y poder así organizar y sostener el pleno empleo y crecimiento que se está buscando.
Es como un momento de máxima creatividad la que se necesita ahora para agarrar tantos enviones y no descuidar tantas otra cosas hechas. La Ciudad, su Estado y su Gente tendrá entonces que buscarle una vuelta importante a todos los posibles escenarios que se puedan llegar a dar.
awesome
¡Guau! Que buen relato. Me dieron ganas de buscar donde está Argüello o Córdoba para invertir en propiedades y sobre todo en los bondis...
Muy amena la lectura y entretenida.
Saludos y felicitaciones por tu escrito.
Saludos cordiales...
jajaj eres un genio de la vida, saludos