No sé si será libertad
no pensar en un nombre cuando llueve
al amanecer,
cuando escribo de amor sin estar enamorada
o estoy triste por mí y no por otros.
No sé si será libertad
sentirse a gusto con la soledad,
llenar el silencio con música y poesía,
no depender de la espera
ni volverse compañera de la incertidumbre,
la nostalgia, la desilusión.
No sé si será libertad
llorar entre multitudes
sin importar que te miren,
reír por el peor chiste,
hablar con quienes alguna vez perdiste
pero siempre quisiste de vuelta,
tener la dicha de sentir un poco de paz
en los tiempos difíciles;
de tener sueños aun viviendo en una dictadura
que te encadena la mente
y se pelea con tu esperanza.
No sé si será libertad
abrazar al dolor para que no se sienta mal,
guardar las lágrimas en un frasco de vidrio
y hacerle cosquillas a la ansiedad.
Arrancar el calendario de la pared,
detener el reloj,
ponerse unos zapatos y salir a correr,
sentir el viento fresco en la cara,
que tus ojos no abandonen el frente.
No sé si será libertad
soltarle la mano a los recuerdos
más felices o más tristes,
a las personas que están ahí
haciendo espacio innecesario
y a la sensación de que no sabes.
Porque sí sabes,
pero siempre eliges hacerte el loco
para no pensar en lo que importa.
Y es que todo importa,
todo aterra,
todo cansa,
todo hiere.
Pero todo importa,
todo puede fortalecerte,
todo anima,
todo cura.
No sé si será libertad
sentir que tienes mucho tiempo
aunque quizá así no sea,
que todo está cerca,
que es posible y si no lo es
no te duele.
No sé si será libertad
que mi mente se haya callado
y sentir que puedo reconstruir el puente
que me llevará quién sabe a dónde,
pero me llevará a algún sitio.
Que lindo corazón... <3 me gusto!
muy lindo tu post amiga