Los libros largos siempre me han parecido una amigable invitación a un extenso viaje en muy buena compañía. Pienso en libros voluminosos tales como Don Quijote de la Mancha, Las Mil y una noches y el Problema de los tres cuerpos.
Son libros que recomendaría leer poco a poco, sin prisas, avanzando cada día unas cuantas páginas en la lectura, paladeando reposadamente las palabras, las historias, familiarizándonos con los personajes, los lugares descritos, en suma disfrutando al máximo de ese hermoso y fértil trayecto en tan grata compañía.
La versión del Quijote que tuve la fortuna de leer, poseía el encanto añadido de haber sido uno de los libros de la biblioteca de mi abuelo, y era notoriamente antiguo y de páginas ya amarillas, todo él denotando su tiempo de vida, los años que han pasado por su lomo.
Mi abuelo paterno murió 12 años antes de mi nacimiento, así que mi manera de estar cerca de él es leer sus libros, sus cartas, acercarme a él a través de sus objetos personales.
Pero retomando el hilo de los libros largos, creo que tienen la cualidad de ir haciéndose carne de los días, de hacernos vivir el día a día dentro de su rumor de voces y relatos, por lo que le confieren a esos días que pasamos juntos a ellos la fortuna de sumergirnos en el río a veces tranquilo, a veces emocionante, siempre entretenido de sus páginas. Claro que los textos breves también poseen su encanto, pero ya ese es harina de otro costal. Me gustaría concluir con un poema de Cavafy que celebra los viajes:
Ítaca
Cuando emprendas el viaje hacia Ítaca,
ruega que sea largo el camino,
lleno de aventuras, lleno de experiencias.
A los Lestrigones, a los Cíclopes
o al fiero Poseidón, nunca temas.
No encontrarás tales seres en el camino
si se mantiene elevado tu pensamiento y es exquisita
la emoción que te toca el espíritu y el cuerpo.
Ni a los Lestrigones ni a los Cíclopes,
ni al feroz Poseidón has de encontrar,
si no los llevas dentro del corazón,
si no los pone ante ti tu corazón.
Ruega que sea largo el camino.
Que muchas sean las mañanas de verano
en que -¡con qué placer, con qué alegría!-
entres en puertos antes nunca vistos.
Detente en los mercados fenicios
para comprar finas mercancías,
madreperla y coral, ámbar y ébano,
y voluptuosos perfumes de todo tipo,
tantos perfumes voluptuosos como puedas.
Ve muchas ciudades egipcias
para que aprendas y aprendas de los sabios.
Siempre en la mente has de tener a Ítaca.
Llegar allá es tu destino.
Pero no apresures el viaje.
Es mejor que dure muchos años
y que ya viejo llegues a la isla,
rico de todo lo que hayas ganado en el camino,
sin esperar que Ítaca te dé riquezas.
Ítaca te ha dado el bello viaje.
Sin ella no habrías emprendido el camino.
No tiene otras cosas que darte ya.
Y si la encuentras pobre, Ítaca no te ha engañado.
Sabio como te has vuelto, con tantas experiencias,
habrás comprendido lo que significan las Ítacas.
En esta maravillosa traducción de Francisco Rivera, vemos como Cavafy reescribe el viaje de Odiseo a Ítaca luego de la guerra de Troya, viaje que dura 20 años, y si en el relato de Homero las vicisitudes de Ulises son muchas durante esos veinte años navegando, en el poema de Cavafy el viaje es algo extraordinario en sí mismo, más allá de la ciudad a la que te diriges, y tu deber es disfrutarlo cada segundo, como los lectores disfrutamos cada instante del trayecto de una larga lectura, que nos proporciona un bello viaje. Les dejo una imagen de los dos libros que tengo que pertenecieron a mi abuelo.
Muy bueno @doctorlibro
Sin dudas los trayectos en los viajes son ideales para aprovecharlos con lecturas, es verdad que actualmente la gente opta por ver peliculas en sus dispositivos móviles, pero la magia de un buen libro no tiene igual.
Saludos amigo, me alegra que te haya gustado el post, y creo que son alimentos terrestres igual de válidos para hacer viajes maravillosos, tanto un buen libro, una buena película, o escuchar música, con cualquiera de ellos se puede emprender un trayecto interior profundo e intenso, muchos abrazos.
Mientras leía recordaba justamente a La Ilíada. Los libros largos tienen la cualidad que mencionas uno se va acostumbrando a su ritmo, y son ese tipo de libros, los largos, los que me dejan cierta tristeza cuando se terminan, es como despedir a un buen amigo.
Tener los libros de tu abuelo debe ser como poder disfrutar algo de él, de sus gustos.
Muy hermoso post, me encanto leerlo.
Un abrazo.
Que casualidad lo de que pensaras en la Ilíada, me alegra que te haya gustado el post, ha sido una experiencia mágica ir conociendo a mi abuelo por medio de sus lecturas y escritos, e igual que tú disfruto mucho los libros largos y no me gusta que se terminen, de hecho hay algunos que simplemente dejo sin terminar, por eso mismo, me ha pasado con Las Mil y una noches, y con los tomos de los Cuentos Completos de Philip K. Dick, he dejado de ambos unas paginitas como salvavidas para momentos dificiles. Muchos abrazos.
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Disfruté mucho leyendo tu publicación y el bello poema. Tengo que darte mi enhorabuena me has emocionado!
Como habitual peregrino del Camino de Santiago el cual he realizado muchas veces, estas reflexiones las he meditado a menudo. Precisamente, lo que me atrae del Camino de Santiago es el recorrido. Claro está que la meta en la Catedral de Santiago de Compostela me atrae, pero disfruto mucho más de todo lo que sucede a lo largo de la peregrinación.
Un saludo 😊
Qué alegría que hayas apreciado tanto el escrito y el poema, hacer el camino de Santiago debe ser una extraordinaria experiencia física, espiritual, personal, y claro, durante el tiempo que dura el recorrido seguro has disfrutado cada momento del mismo, a mí me pasa cuando viajo, si son viajes largos se piensa en muchas cosas, voy urdiendo proyectos creativos en mi imaginación, medito sobre cosas que me gustaría hacer, los viajes pueden ser vivencias muy potentes interiormente, muchos abrazos.
Estuve checando tus contenidos y me sorprende el poco apoyo que recibes... Es decir, para ser contenidos de calidad, creo que hay algo que falla en vuestra estrategia de promoción como blogger. En lo que respecta a éste servidor, debieras tenar ya una reputación más alta.
Hay una pregunta clave en todo esto: ¿Socializas en Discord (app que usa los steemians para promoverse) dentro de las comunidades hispanas?
De no ser así, te invito a que lo hagas...tienes la madera con la cuál estar más alto dentro de la plataforma. Buen escrito.
Saludos amigo fermionico, he tardado tanto en responderte porque apenas ahora me doy cuenta de tu comentario, pero bueno, tienes razón al decir que no tengo una buena estrategia de promoción, me han invitado a participar en chats discord pero honestamente no he sabido como hacerlo, confieso que no me manejo muy bien en las redes sociales porque hasta ahora no había participado de ninguna, esta es la primera en la que estoy y aún tengo mucho que aprender, valoraría cualquier instrucción al respecto que quisieras darme, agradezco tu preocupación, abrazos.
Viajar y leer van siempre de la mano, porque ¿qué es la lectura si no un viaje? entonces combinar ambas actividades siempre resulta gratificante. Excelente edición del Quijote. Saludos y gracias por compartir.