“¡Qué duro es esto, doctor!” contaba el médico de Franco, Vicente Pozuelo, que le dijo el "generalísimo" después de que le tirara de la sonda y le extrajera con la mano un coágulo de sangre “tan grande como un puño”. Era el 2 de octubre de 1975 y el dictador sufría una hemorragia incontenible. Cuando la enfermera fue a reponerle la sonda, con un dramático hilo de voz Franco ordenó (toda petición suya siempre era una orden): “Déjenme ya”...
Manifestación dos meses antes de aprobar la Constitución española. 1978
Pero no le dejaron. Su corazón, mantenido en una larga y dolorosa agonía a base de dopamina, no consiguió dejar de latir hasta las 03´30 horas de la madrugada, dos horas antes de la hora que se transmitió oficialmente, como ha certificado el doctor Vital Aza. Franco murió el 20 de noviembre de 1975 y todo esto lo narra la periodista española Victoria Prego en su libro y en su estupenda serie documental acerca de la Transición en España.
Noticia de la muerte del dictador en la prensa española. 20-XI-1975
La denominada Transición fue, digamos, inventada por España. Fue por ello intransferible y consumada para siempre, como dejó dicho el hoy también fallecido secretario general del Partido Comunista español, Santiago Carrillo: “La idea de un modelo olvida que cada país tiene sus características. Aquí las cosas pasaron de la única manera que podían pasar en aquel momento” Pero la Transición a la democracia en España no empezó tras morir el dictador. Comenzó a fraguarse alrededor de 1970.
Santiago Carrillo, en el centro, ríe junto al ex ministro franquista Manuel Fraga (su adversario político), naturalmente, a su derecha
Si acudimos a un dato confesional, ya que aquella España era católica por decreto, en 1965 había en el país 8.500 seminaristas. Pero en 1975, cuando muere Franco, sólo quedaban unos 1.700. En aquellos años del Concilio Vaticano II España dejó de ser un país pobre, aunque siguiera estando ‘en vías de desarrollo’. El diálogo entre marxistas y cristianos era importante, y la cúpula de la iglesia evolucionaba con el recordado cardenal Tarancón. En la trastienda social, la izquierda se preparaba para cambiar su disyuntiva de ‘república o monarquía’ por ‘monarquía y democracia’. Y son sólo algunos datos. El ex Presidente Calvo Sotelo, ya también desaparecido, abundaba en esta idea cuando analizaba que el franquismo no estaba tan arraigado ya en aquellos años, y por eso “sus representantes políticos se hicieron el ‘harakiri’ aprobando la Ley para la Reforma Política del primer gobierno Suárez” (Adolfo Suárez fue el primer presidente democrático español tras la dictadura franquista).
Suárez saluda a la dirigente comunista Dolores Ibarruri "Pasionaria"
El ciclo de la Transición se cierra probablemente con la mayoría absoluta conservadora obtenida por el PP (Partido Popular) en las últimas Elecciones Generales del 3 de marzo de 1996. Se cerraba así el círculo de haber tenido una legislatura constituyente, una Constitución aprobada en referéndum, una primera legislatura en la que gobernó el centro político, la constitución de ayuntamientos, diputaciones y comunidades autónomas, la amplia victoria por primera vez del Partido Socialista tras casi 40 años de dictadura de extrema derecha y, ya en 1996, la vuelta de la derecha de nuevo democrática al poder. Aunque muchos dan por concluida la Transición en España con ese anterior triunfo del PSOE (Partido Socialista Obrero Español) y el acceso a la Presidencia de Felipe González el 28 de octubre de 1982.
De la misma manera, muchos concretan su comienzo en el día de la coronación del rey Juan Carlos Iº (“aquel príncipe que hizo cosas inesperadas y asombrosas para evitar la confrontación social”, según cuenta la periodista Pilar Cernuda en su libro ‘30 días de noviembre’) Hablamos del mismo rey Juan Carlos, hoy emérito, que terminó pidiendo perdón a los españoles tras una tormentosa cacería en Botswana y abdicando poco después en su hijo, Felipe VIº, actual monarca representativo y constitucional de España.
Portada de norteamericana de la revista Times. Noviembre 1975
Felipe VIº es noticia estos días por sus apariciones públicas como respuesta al desafío catalanista y, precisamente ayer, por haber cumplido 50 años y haberlo celebrado con su mujer, la reina Letizia (periodista antes de casarse con el entonces príncipe Felipe) y sus dos hijas, la pequeña Sofía y la primogénita Leonor. De la entrega del denominado Toisón de oro a la princesa y las cálidas pero políticas palabras a su hija del Rey os dejo aquí una imagen del reportero gráfico Carlos Rosillo, publicada en el diario El País:
Felipe VIº y la princesa Leonor
El ex presidente socialista Felipe González definió así, cuando se cumplieron 25 años de la muerte del dictador, aquel proceso hacia la libertad que estudian en universidades americanas como modelo político de 'transición' hacia la democracia: “Unos pocos recogimos las aspiraciones de millones, por esa mezcla de azar y necesidad que produce la Historia”.
Felipe González en las primeras elecciones que ganó. 1982
Y de entre esos pocos, nadie conocía bien a nadie, y, por suerte, casi todos se equivocaron para bien de la mayoría. Por ejemplo, el ‘delfín’ del propio dictador Franco, incluso criado en parte por él, fue al final el monarca que ayudó a traer la democracia (como demostró Juan Carlos Iº tras su contundente actuación pública en el intento de involución política del teniente coronel Tejero y los generales Armada y Milán del Bosch, en el frustrado asalto al Congreso el 23 de febrero de 1981)
Suárez y el diputado ex teniente general Gutiérrez Mellado se enfrentan a los militares golpistas que han tomado el Congreso
Y el ‘paladín’ del franquista Movimiento Nacional, Adolfo Suárez, fue precisamente quien primero gobernó el país hacia la libertad. La dolorosa paradoja es que demasiados años antes de morir ya no recordaba nada de todo aquello, sumido en un profundo mal de Alzheimer.
Incluso el ‘diabólico’ y 'hereje' Partido Comunista era legalizado un santo Sábado Santo en plena Semana Santa; y el ‘demonio rojo’ del comunismo español, Santiago Carrillo, se presentó ondeando la misma bandera “una, grande y libre” que había hecho suya el régimen franquista, aunque con el escudo constitucional que la diferenciaba de la dictadura que quedaba atrás y la identificaba con la democracia que hoy disfruta el país desde entonces.
Gente en la calle tras la legalización del Partido Comunista en España
Hoy, casi 45 años después de aquella negrura franquista, ya no le queda a esta sociedad nueva, como tanto denunciaba el profesor Ernest Lluch, ni una última y sangrienta tristeza de entonces: la banda terrorista que le asesinó, ETA.
Ayer estuve viendo la película ‘Fe de etarras’ y me resultaba hilarante y doloroso a un tiempo comprobar que lo que queda del terror que provocó ETA es sólo su ridículo y un olvido rapidísimo, excepto para los sufridos familiares del millar de víctimas de la banda ya disuelta que, de manera absurda y para conseguir nada, se llevaron por delante.
Fe de etarras, dirigida por Borja Cobeaga. 2017
Y este post viene a colación, continuando un poco el post anterior que subí sobre Andalucía, para hacer balance aunque no sea una fecha señalada o aniversario relevante, porque el esperpento institucional del independentismo de una parte del pueblo catalán y sus frívolos representantes copa día tras día la atención mediática. Harto de ver una y otra vez el asunto en las pantallas y de oírlo en las radios, uno siente cierta rabia de que con todo lo vivido en España desde la muerte de Franco, sean precisamente unos viejos nuevos nacionalistas quienes necesiten resucitar al dictador, su presencia, una y otra vez, para así poder desacreditar el país del que quieren separarse a estas alturas del siglo XXI en Europa.
Ex presidente de Cataluña, Carles Puigdemont, fugado en Bélgica
Como siempre, os doy las Gracias por vuestra generosidad lectora, sobre todo a quienes no sois españoles y, sin embargo, consideráis interesante la Historia de un país que no es el vuestro. Y os dejo (con imágenes de la España de aquellos días de los que os hablo en este post) la canción del grupo Jarcha que se convirtió en un himno ciudadano de la Transición con la que se pedía 'Libertad sin ira' tras una dictadura. Una demanda en absoluto comparable al burgués grito de libertad de los independentistas catalanes que pretenden separarse de manera inconstitucional del resto de España, con la irresponsabilidad de romper la convivencia de la mitad del pueblo catalán con la otra mitad, desde un victimismo ilegítimo e insoportable de peculiares oprimidos que disfrutan de los derechos y deberes que les permiten ser lo que son en una sociedad democrática homologada con el resto de la Unión Europea.
Con todo, de nuevo: Gracias
Libertad sin ira. Jarcha. YOUTUBE
(c) Domi del Postigo
www.domidelpostigo.es
Gran resumen, los que no vivimos esos tiempos también nos gustaría ser parte de la construcción de otro modelo de sociedad mas justo si cabe y dejar atrás ciertos "vicios o hábitos" que por desgracia aun se arrastran de tiempos mas oscuros. Respecto a lo de Cataluña, entiendo porque lo hacen los partidos de derecha, no entiendo muy bien como los partidos de izquierdas quieren polarizar aun más a las clases populares y crear un sentimiento ultra-nacionalista que nunca ha llevado a una sociedad a la convivencia, la paz y sobretodo a la libertad.
Esos vicios o hábitos que atinadamente mencionas forman parte de la condición humana. La tensión Justicia-Libertad y otras similares están detrás de los extremismos que pretenden hacer de la creencia de un mundo mejor y más libre e igualitario una utopía peligrosa. Respecto a que la izquierda se haya apuntado al nacionalismo es un absurdo más de la liquidez, como apuntaba Bauman, de estos tiempos nuestros. Que la izquierda sea nacionalista es contradictorio con su esencia internacionalista y de clase. Pero si hay ciudadanos que, como tú, tienen la necesidad de no pasar desapercibidos en este batiburrillo y construir futuro y no sólo quedarse mirando cómo lo enmierdan otros, un mundo mejor siempre será posible. Gracias una vez más, @divisionespacial
Gracias, conocía a Bauman pero no había leído el concepto de "modernidad liquida".
Muchísimas gracias por haberte detenido a responderme de manera tan afanosa e ilustrativa, es un detalle sin duda.
Conozco poco tanto detalle manejado en el post, sin embargo recuerdo cuando murió Franco, me alegré mucho por el pueblo español. Luego vino "el destape" ¡no?, leí muchas cosas, recuerdo que me suscribí al "Viejo Topo", muy buena información, todavía tengo las revistas, oía a Joam Manuel, junto con Facundo Cabral y otros locos de la época (Silvio, Pablo, Alí, Mercedez, les lutrhiers), en fin, utopía concentrada a grandes dosis. Pero siempre la pregunta está allí, estos "lideres" independentista (de que?, todavía no entiendo) acaso ven con ojos distintos al pueblo llano, son menos oligarcas de quienes se quieren separar, que es lo distinto que ofrecen?. El mismo discurso y la misma actuación, será que construimos nuestra propia comunidad con una "blockchain" social.
Algo así será, @germangv-53. Afilada metáfora la tuya, como tu inteligencia. Una delicia leer siempre tus reflexiones y constatar la generosidad que pones en la lectura de algunos de mis posts. Gracias muy sinceras, aporten o no steems