Recuerdo que un amigo se fue a San Andres a descansar, en el viaje se compro un celular super caro que por culpa del agua del mar le toco comprarse un cargador inalambrico para que pudiera funcionar la batería.
Hoy en día esta quejándose todo el tiempo que la plata no le alcanza para nada y cosas de ese estilo, pero cuando cambio su celular por otro mejor no se detuvo a pensar que tendría que sacrificar para pagar eso.
A veces nosotros mismos nos llenamos de deudas y lo digo por experiencia propia que tengo copada 2 tarjetas de crédito por estar comprando cosas y diferirlas a miles de cuotas, es duro porque a uno le da el impulso de idiotez y se enloquece con ese plástico.
Voy ha hacer todo lo posible por pagar eso y después hacer un funeral vikingo con las tarjetas lo juro!!!.