Muchos niños menores de seis años lanzan juguetes o se lanzan ellos mismos al suelo o contra el blanco más cercano cuando se sienten frustrados cuando están furiosos, simplemente cuando tienen ganas de alborotar ¿por qué?, porque el razonamiento o la transacción no es una de sus técnicas para la solución de sus problemas, por es importante que usted le explique lo que es aceptable y qué no para otras personas a modo de que se lleguen a llevar bien con los demás.
Es indispensable que usted supervise el juego atentamente, controle la forma en que ella y sus amigos cuiden de sus juguetes para evitar comportamiento agresivo.
Un aspecto relevante es que usted no le enseñe conductas agresivas, por ejemplo si usted arroja cosas cuando está furioso, o golpea muebles cuando algo no le sale bien son características que su hijo destacará constantemente.
Señales cuales son los actos de violencia: morder, pegar, cuando vea que otros niños lo cometan como ejemplos claros de lo que no es correcto.
Como resolver el problema:
Dígale a su hijo qué hacer fuera de pegar, por ejemplo a decir: “no juego más” enséñele a buscar ayuda de un adulto. Decirle cuando estés enojado aléjate del grupo.
Felicite a su hijo cuando se lleve bien con otros niños
Emplee reprimendas.
Olvide el incidente cuando haya pasado.
Lo que no debe hacer es perder la calma y pegarle a modo de reprimenda, recuerde que precisamente se trata de hacer que su hijo haga de lado la agresividad, si usted le grita tampoco será parte de la solución.
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Importantes consejos, la educació es demasiado importante.