En las noches de soledad, cuando la luz se hace oscuridad
cuando los parpados caen y los sueños comienzan
el alma abandona el cuerpo, se desplaza a placer
caminando entre nubes, admirando la belleza natural
sosteniendo estrellas, moviendo mares, observando
la vida ante ojos desnudos
sonidos nuevos que se hacen melodías para escuchar
el canto del cielo cual armonía resuena en mi piel
olas chocando con limites con el universo.