SOPORTANDO MI DISMORFIA
Cada día que pasaba me preguntaba: ¿qué hay de malo conmigo?, ¿no valgo nada?, ¿no merezco que las personas me quieran?, realmente desde muy pequeña las personas han creado miles de inseguridades en mí... Hace unos meses no sabría qué hacer o cómo sobrellevar las cosas, pero hoy estoy preparada para levantarme y ser feliz por quien soy y como soy, esta es mi historia...
Entrar a la preparatoria es un cambio drástico para todos los adolescentes, es una nueva etapa de la vida, muchos cambios tanto en la sociedad como en tu cuerpo y ahí estaba yo... Carol, una adolescente de trece años, donde toque fondo con la dismorfia corporal.
Para los que no saben, la dismorfia corporal es la preocupación excesiva por el físico o apariencia.
ASI COMIENZA
Hace años atrás había sido rechazada muchas veces por mi físico, mi "gordura de infancia", no tenía el mejor orden alimenticio y tampoco me interesaba mucho cómo me veía; para mí estar feliz y poder comer lo que quisiera, era lo importante (todavía lo siento), muchas personas se burlaban de mi y mientras transcurrían los años sentía que me quedaba sola, y así era... poco a poco se alejaban de mí o hacían críticas destructivas, que para una niña, no era fácil de soportar.
Llegó en mi vida la etapa del desarrollo, mi cuerpo comienza a cambiar, empiezo a ver cambios que serían satisfactorios para mí y para las demás personas, creo, ya que esas personas que se burlaron fueron las mismas que me dijeron que "estaba linda" y "que el cambio me tendía bien", no me quejo, realmente estaba aceptandome.
Pasó el tiempo, siempre me he caracterizado por ser una persona fuerte, aunque por dentro sea muy débil; me sentía complacida conmigo misma y segura.
Un día compartiendo con un grupo de amigas en horas de clases (yo me caracterizaba por entrometerme en la privacidad telefónica), vi un mensaje sobre mí:
- Me agrada el cambio drástico de Carol, se ve tan diferente, pero, ¡tiene que rezar bastante para llegar a ser tan bonita como se la cree!
En un segundo mi autoestima se fue al piso, me sentí tan mal, que tuve que tomar una decisión, cambiar mi estilo de vida...
COMIENZA EL CAMBIO
Comer saludable no es tan fácil como todos creen, más cuando hay tantas tentaciones, pero estaba decidida a cambiar mi vida, quería convertirla en "fit" (estar en forma y tener una alimentación saludable) y así fue, comencé a entrenar y media cada alimento que pasaba por mi boca, es agotador contar cada caloría, hacer divisiones adecuadas, comer en horas exactas, tomar mucha agua y controlarlo todo.
Fue una gran experiencia, aprendes a conocer tu cuerpo y qué es lo que realmente necesitas... Cada día bajaba medidas y era más frecuente los "piropos" de la gente, para los ojos del mundo estaba bien, menos para los míos.
Día a día me miraba en el espejo y no veía mejoría, me sentía cada vez peor, estancada, no llegaba a ser como mi modelo favorita, seguía teniendo rollitos (o al menos eso pensaba), seguía estando inconforme con mi cuerpo.
Tomé medidas drásticas, pensé que dejando de comer conseguiría que acaba de una vez por todas mi "gordura de infancia", muchas personas comenzaron a llamarme anoréxica y me comenzaba a creer, mi mente no veía lo que el espejo sí y esto lo empeoró, sufrí un desorden alimenticio, una enfermedad que llevaré por el resto de mi vida controlando, arriesgué mi salud y nada de esto me hizo sentir mejor...
LA ACEPTACIÓN
Era tiempo de tocar fondo, mi autoestima había sufrido mucho, mi salud había sufrido mucho y mi cuerpo había sufrido mucho. Me levanté un día pensando en años atrás, dándome cuenta que buscaba amor en los demás mientras yo misma no me lo daba "¿cómo me podían querer si yo misma no lo hacía?", "¿cómo pueden respetarme como soy, si yo misma no lo hago?" Y eso bastó para mí, darte cuenta que no todo es el físico no es fácil, pero vale la pena amarse y quererse tal y como es, con nuestros defectos y cualidades. No me arrepiento de mis actos, aunque sí podría haberlo hecho mejor. Doy gracias por ese mensaje, fue el mensaje del cambio, tal vez todavía estuviera estancada o tal vez no, pero ese mensaje me ha hecho la persona que hoy soy, fuerte y segura de sí misma.
¡Amate y quierete como eres, la esencia de las personas es su belleza interior!
hola que bueno que puedes hablar de eso, hay tanta gente que no se ama y no valora la vida. gracias por compartir tu historia@grexyleal37 te sigo
Muchas gracias!!!