Soy un cuerpo vacío que se alimenta de las sobras de tu piedad
Di que te doy lástima,
dime que ya no existirá un mañana para nosotros,
termina de cortar la cuerda que sostiene la guillotina,
deja que ruede de una vez mi cabeza.
Córtame las manos para que no te escriba,
elimíname tu número de mi cabeza,
quítame las caricias que me dio tu cuerpo,
bórrame los besos que me dibujaste en la pizarra de mi rostro,
sácame los ojos para ya no tener que verte y tampoco ver nada de este asqueroso planeta.
Detén tu carro y déjame tirado en media carretera,
déjame morir de hambre y agonía de perder tu amor.
Aléjate que me estoy haciendo daño persiguiéndote y me mata la ansiedad por saber de ti.