Al crecer nos olvidamos de los buenos momentos que pasamos como niños, sin embargo cuando estamos rodeados de niños solo recordamos, las cosas que vivimos cuando niños.
Mis hijos crecieron y se perdió esa ilusión de la niñez, sin embargo llego una chiquita que nos cambio la vida a todos, Guiliana, mi sobrina hermosa, la cual ahora es la consentida de mi hermana.
Esta niña fue un milagro, mi hermana, no podía salir embarazada, le diagnosticaron que tenía las trompa obstruidas y le digestión que no saldría embarazada, sin embargo, se hizo una plegaria al cielo y yo una promesa a San Sebastián, gracias a Dios se hizo el milagro y nació Guiliana, la chiquita de la casa.
Cuando Dios habla no hay humano que diga lo contrario, Dios le bendiga, hermosa.
Amen. Así mismo es, saludos