Después de leer el discurso sobre el dinero que pronuncia un personaje en "La Rebelión de Atlas" entendí un par de cosas. El dinero no es ni bueno ni malo, es la manera de ganarlo lo que le da una connotación positiva o negativa.
Me explico. El dinero bien habido producto de tu inteligencia y tu esfuerzo es una prenda de honor, un premio a tus cualidades y por lo tanto te hará más feliz pues es un reconocimiento a tus virtudes. Pero si es mal habido se convierte en una maldición porque te degenerará como individuo, te corromperá progresivamente y te traerá cada vez más miserias morales.
Entonces, el dinero no es más que un catalizador, si eres bueno y lo mereces te ayudará a ser aún mejor; si no lo eres, el dinero te hará un ser aún más detestable que si no tuvieras nada.
Saludos @jcalero me encanta encontrar tu comentario :D El clásico tema del «bien» y el «mal» me recuerda a Nietzsche con su «Más allá del bien y el mal», pero más allá de esto ajajjajajaja lo que sentimos cuando realizamos nuestras acciones es un indicador (es como una brújula) que sin duda es la mejor guía para nuestro recorrido por este mundo, lo que realmente no sé, es que si una persona sedienta de poder tenga por completo dañada esta herramienta :/