Evolución de la vida hasta llegar al hombre.
Al hablar de la evolución de la vida, hay dos cosas que para mucha gente pueden parecer como un misterio (y lo son) pero un misterio que presenta dificultades de orden filosófico y teológico.
La primera pregunta que puede dar esta impresión es, ¿cómo ocurre esta evolución? ¿ocurre por azar o hay algún tipo de plan para que la vida vaya evolucionando?.
Segundo, si toda esta evolución nos ha dado tantas formas distintas de vida, basta también la evolución para explicar que exista el ser humano.
A la primera pregunta se contesta con algo muy obvio. Por ejemplo un pollito se construye a si mismo desde el huevo. Un científico dirá que hay una programación a nivel microscópico, tan microscópico que en el núcleo de una célula y la célula sólo se ve al microscopio hay una molécula que tiene 10,000 millones de átomos y cada grupito de átomos es una instrucción. Ahí de alguna manera está marcado todo el desarrollo de ese organismo, pero está marcado de una forma tan misteriosa que si de una célula paso a un billón de células, todas ellas tiene exactamente la misma programación, todas, y sin embargo una llega el momento que se convierte en una celula del corazón, y otra en una célula del sistema nervioso, y otra en una célula capaz de ver, y otra en una célula de un músculo, y otra en una célula del sistema digestivo. ¿Cómo saben cuando tienen que hacerlo y cómo decide cada célula lo que tiene que hacer?. Estamos hablando de algo que es un verdadero misterio porque lo importante de la vida no es sus componentes sino como están estructurados. ¿Por qué se puede decir que hace falta información ahí? Porque sino no ocurre nada que tenga sentido.
Pensemos en un ordenador salido de fabrica, tiene los miles de miles de transistores en sus circuitos eléctricos, ¿qué puede hacer? Nada. Alguien tiene que escribir un programa y alguien tiene que poner ese programa utilizando un código diseñado por alguien y entonces ese programa obligua a las corrientes eléctricas a hacer algo de lo cual, el ordenador no tiene ni idea ni se aprovecha de nada para ello pero que tiene sentido para el que conoce el significado del programa y de los símbolos. ¿Quién hace el programa para un ser viviente? ¿Quién pone el programa dentro para que cada una de esas células para que el organismo se haga como debe hacerse?. Decir que esto ocurre por azar es tan absurdo como decir que un ordenador va a tener el programa porque se lo hace a si mismo por azar. Ah no, el ordenador nunca se hace su programa.
¿Y qué es el azar al fin de todo? Pues no es nada. ¿Puedes medir azar con un experimento de laboratorio? Pues no. El azar es nada más que una palabra para disimular ignorancia.
Es como cuando el papá le dice al niño que el sol brilla porque sí porque es brillante; eso no es una explicación. De modo que la evolución exige algo más que hablar en términos de azar para explicar cómo se forma cada ser viviente con una programación tan compleja que cuando se ha calculado matemáticamente que probabilidad habría de que una molécula del genoma humano, (todo lo que es el material genético del ser humano) se produzca por azar. No hay una probabilidad ni aunque hubiese un trillón de universos como éste y cada átomo de todos esos universos estuviera haciendo un millón de operaciones por segundo para ver si sale por casualidad esa molécula, no hay posibilidad alguna de explicar. Entonces cabe perfectamente explicar en términos filosóficos y teológico, de que el creador al crear el universo le da un modo de actuar que sigue leyes físicas a partir de unas condiciones originales porque el creador sabe que comenzando con estas condiciones y esas leyes físicas se va a producir esto y esto y esto a lo largo de la existencia del universo.
Así pues, podemos aceptar filosófica y teológicamente la evolución, pero lo que no es ciencia, es decir que esa evolución se debe sólo al azar porque eso no es decir nada. Y así tenemos que preguntarnos luego, ¿ésta evolución puede llevar al hombre? Desde el punto de vista biológico, sí. La diferencia biológicamente entre el hombre y el chimpancé es un poco más del 1% nada más en el material genético. ¿Entonces ya se explica que el hombre aparezca por pura evolución? No, porque la evolución solamente puede producir un nuevo órgano o una nueva manera de actuar fija. Una araña no cambia el estilo de la tela con la moda, una abeja no calcula cómo ha de hacer el panal para que sea más bonito. Hacen las cosas de una manera automática fija. El hombre en cambio tiene libertad, decide lo que quiere hacer y lo hace responsablemente y libremente.
¿Y se puede explicar el Quijote por puro azar? Pura tontería. ¿En qué está entonces el hablar de todo lo que es propio de la inteligencia humana? ¿Es la inteligencia humana una secreción química del cerebro? No, eso nadie lo dice. ¿Es la inteligencia humana algo que se puede reducir a las 4 fuerzas de la material? No, ni la fuerza gravitaría puede escribir una poesía ni la electromagnética ni las fuerzas nucleares.
Entonces hay que admitir que en el ser humano hay algo que no puede provenir de la materia, que no puede ser simplemente efecto de una evolución material y que sólo un espíritu puede explicar toda la actividad del hombre, artística, ética, el sentido de responsabilidad, libertad, todo eso exige una causa no material y entonces el único que puede dar lugar a que exista esa realidad no material es el mismo creador no material que ha dado existencia al universo. El hombre no puede explicarse por mera evolución como puede explicarse un mono, y aun el mono no puede explicarse por azar sino que exige un programador para que se de esa evolución que hemos descrito.
Hola Jiimekun. No comparto tu versión creacionista de la evolución por dos motivos fundamentales:
a) Si realmente fueramos producto de un diseño inteligente, se podían haber eliminado a priori todos esos renglones torcidos. Por qué no haber creado un sistema immunitario a prueba de bombas para evitar infecciones o una sistema de control de calidad en la replicación celular? Para que permitir todos esos fallos de diseño?
b) En muy poco tiempo, el ser humano habrá creado sistemas inteligentes que nos superaran con creces incluso en lo creativo. ¿Eso nos convierte en dioses?
Un saludo
En primer lugar, gracias por tu comentario. Lo que nos une a toda persona es las ganas de conocer la verdad y entender el universo, por eso me alegra tu comentario para debatir esa realidad verdadera que nos rodea. Te invito a leer la primera parte si no lo hiciste. Ahora te respondo.
Está claro que a nivel científico aún no hemos dado con muchos misterios que quizás algún día lo podamos entender con un razonamiento científico pero hasta hoy, se nos escapan de las manos muchos puntos por lo que ya tenemos que tener una postura filosófica e hipotética al porqué de las cosas. Como me gusta decir, las cosas son lo que son y no lo que a uno le gustaría. No voy a gastar tiempo en pensar porque un creador o la evolución no nos ha hecho más perfectos. Como ingeniero informático, no puedo estar de acuerdo en el punto b ya que el ser humano no puede programar tal creatividad superior, solo bajo el patrón que tu le des que puede ser tan compleja como quieras pero nunca superior. Mi versión es creacionista y evolucionista ya a mi modo de entender las cosas, es lo que mejor encaja para explicar los misterios que la ciencia no logra resolver. Nuestro código genético está programado y las cosas no se producen por azar porque el azar no se puede medir en laboratorio. Te invito a seguir leyendo los próximos capítulos y dándome tu opinión. Gracias!